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Exige pago por destrucción de su negocio

Exige pago por destrucción de su negocio
Choque.

Publicación:13-05-2020
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El local permanece acordonado, debido a que el inmueble tiene que ser demolido por completo por el riesgo de un derrumbe.

El dueño de la rosticería que fue destruida por un camión urbano durante un accidente vial, pidió la intervención de la Fiscalía General de Justicia, para que le paguen los daños materiales que superan el millón de pesos.

El local permanece acordonado, debido a que el inmueble tiene que ser demolido por completo por el riesgo de un derrumbe.

Además de los daños al local, quedaron destruidos refrigeradores, parrillas, asadores profesiones y otros implementos de trabajo.

El afectado se identificó como Enrique, quien interpuso una denuncia por daños en las oficinas del CODE.

El comerciante dijo que ninguna de las compañías de seguros que representan a las rutas urbanas se quiere hacer responsables.

Estos amenazaron con llevar el caso a querella ante un Juez de Control, para evadir pagar de inmediato la reparación del daño.

El accidente se reportó a las 8:00 horas del pasado martes, en la calle Arteaga y Joaquín G. Leal, en el Centro de la Ciudad.

En ese lugar estaba ubicada una sucursal de la cadena de Pollos Supremos.

En ese sitio se impactaron dos camiones de rutas urbanas, uno de los cuales terminó estampándose contra el local comercial.

Uno de los camiones participantes pertenece a la ruta 223, donde resultaron seis de los usuarios con diversas lesiones.

Siendo identificado el chofer y presunto responsable como Francisco Javier Castillo, de 35 años de edad.

Mientras que el segundo de los vehículos implicados es una unidad de la Ruta 214, donde resultaron otros dos pasajeros heridos.

Según los informes de las autoridades, el primero de los camionesse desplazaba a toda velocidad por la calle Arteaga.

Mencionaron que el semáforo había cambiado a color rojo, por lo que el chofer aceleró en un intento por cruzar la calle Joaquín G. Leal.

Desafortunadamente no se percató que el chofer de la ruta 214 había ya arrancado, y terminó impactándolo en forma violenta.

Tras el choque, el camión de la Ruta 223 se proyectó contra un negocio de venta de pollos rostizados.

 




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