Israel y Brasil reportan victorias de ancianos

Jerusalén.- Los pacientes de edad avanzada que superan el contagio de la nueva cepa de coronavirus, continúan registrándose en todo el mundo, en muestra de que adquirir el COVID-19 no es una condena de muerte inapelable.

Uno de los casos más recientes fue el de una pareja israelí dada de alta en el Centro Médico Barzilai de Ashkelon, ciudad costera del sur de Israel, que superaron el internamiento médico tras su ingreso con la infección a fines de marzo.

Rahamim Bracha, de 90 años de edad, fue hospitalizado el pasado 22 de marzo y su estado demandó el uso de un ventilador durante varios días. Luego, el 26 de marzo, la siguió su esposa Shoshana, también contagiada.

Ella se recobró primero, pero rechazó salir del hospital y dejar a su esposo. "Yo tenía 18 años de edad cuando me casé con él hace 70 años", explicó sobre su negativa.

Finalmente, este domingo la pareja salió junta del Barzilai, en medio de agradecimientos al cuerpo médico y de enfermería que los trató a lo largo de casi tres semanas, describe Times of Israel.

La feliz historia no niega que la personas de edad avanzada sean las que mayor vulnerabilidad muestran a la infección, pues de las 103 personas de edad avanzada afectadas en Israel, la mayoría ha fallecido.

Otro caso afortunado se registró en Brasil, donde Gina Dal Coletto, de 97 años de edad, recibió su alta del hospital Vila Nova Star de Sao Paulo, tras superar la infección de la cual comenzó a ser tratada el pasado 1 de abril.

La mujer recibió un doble diagnóstico: influenza y coronavirus, y su condición obligó a llevarla a terapia intensiva donde inclusive recibió  tratamiento con oxígeno.

Ya en cuidados intensivos, mostró inflamación cardiaca y pulmonar, hasta que remontó ambas infeciones y fue dada de alta también la víspera.

Brasil repite la tendencia mundial: la mayoría de quienes mueren por COVID-19 rebasan 60 años de edad, pero muestran otras condiciones como cardiopatías, dolencias hepática, neurológicas y renales, asma, diabetes, inmunodepresión y obesidad, señaló el sitio brasileño Examen.