Comunidad dancística demanda apoyo frente a la contingencia

México.— Frente a la situación de precariedad por no contar con un empleo formal, así como el goce de un salario y prestaciones, la comunidad dancística de México ha dado a conocer una serie de demandas para la reactivación económica del sector frente a la contingencia a causa del COVID-19.

      La iniciativa del Congreso Nacional de Danza incluye las propuestas de trabajadores de esta disciplina radicados en diferentes estados del país, documento que será presentado a las autoridades durante el próximo 27 de abril, ello en espera de obtener un pronunciamiento gubernamental público acerca de las medidas de atención para este sector.

      El documento está dirigido a Andrés Manuel López Obrador, presidente de México; Alejandra Frausto Guerrero, secretaria de Cultura federal; Arturo Herrera Gutiérrez, secretario de Hacienda y Crédito Público; Luisa María Alcalde Luján, secretaria del Trabajo y Previsión Social; Sergio Mayer Bretón, presidente de la Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados; así como Susana Harp Iturribarría, presidenta de la Comisión de Cultura del Senado de la República.

      Se presentará también ante los representantes de las instituciones culturales de todos los estados, entre ellos el Instituto Cultural de Aguascalientes, el Centro Cultural Tijuana (CECUT), el Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Chiapas, el Instituto Estatal de la Cultura de Guanajuato y el Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Nayarit.

      En el diagnóstico, conjunción de propuestas y redacción del documento participaron 218 profesionales, de 27 estados con 267 propuestas, las cuales se recopilaron mediante un formulario en internet y mesas de trabajo divididas en tres categorías: reactivación económica de bailarines, reactivación económica de coreógrafos, maestros, investigadores y promotores, y reactivación económica de foros y academias.

      En él se enlistan algunas de las necesidades apremiantes para la reactivación económica de este sector, con el fin de amortiguar la crisis económica por pérdida de empleos, la cancelación de contratos y actividades; asimismo, se proponen una serie de actividades con respecto a programas sociales, estímulos económicos, educación, producción y oferta en línea.

Un sector sin privilegios

En el comunicado presentado expresan que los trabajadores de la danza en México no gozan de privilegios, ya que en su mayoría forman parte de la población sin empleo formal: “La contingencia actual por el COVID 19 no sólo pone en riesgo la producción artística, sino la posibilidad de subsistencia de los propios hacedores de danza ante la falta de sustento alimentario y la atención médica”, expresaron en el documento ya referido.

      Entre las demandas está el establecer objetivos presupuestales que garanticen el beneficio directo al sector, por ejemplo: un seguro de desempleo; apoyos a la pequeña empresa a través de créditos otorgados a foros, academias, agrupaciones artísticas y asociaciones civiles culturales; y el diseño de programas específicos para la contratación de los servicios de los profesionales de la danza.

      También se demanda la integración de los artistas como beneficiarios del Programa para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores; la reasignación de presupuestos de programas culturales priorizando el financiamiento de producciones de danza y su beneficio social; campañas de fondeo y patrocinios para foros y festivales; y el pago inmediato de servicios brindados por contrataciones.

      Además de lo anterior, los integrantes del Congreso Nacional de Danza proponen la realización de una programación nacional de reactivación de encuentros nacionales, estatales, festivales y congresos; la vinculación con los programas nacionales, estatales y municipales de fomento turístico para la contracción de grupos dancísticos; así como un programa de difusión a nivel nacional de la danza, con una cartelera y estrategias de promoción en medios de comunicación.

      Dentro del escrito firmado por más de 200 integrantes del sector dancístico mexicano, también se solicita la puesta en marcha de programas nacionales y estatales de danza online, que consideren un fondo de inversión para permisos de transmisión en plataformas de gran alcance para obras y repertorios, co-producciónes y espectáculos transdisciplinarios; y la proyección online de festivales y programaciones Institucional estatales con pago de honorarios a los participantes.

      Finalmente, dentro del diagnóstico y estrategias de acción propuestas en el comunicado, se pide contemplar el fomento económico para creaciones artísticas colectivas en línea y la transmisión de sus presentaciones; la activación de espacios independientes difundiendo en línea eventos artísticos; así como una convocatoria de financiamiento para la investigación y documentación de los procesos sociales desde la danza y el cuerpo en torno a la contingencia sanitaria.