La homosexualidad no es un tema nuevo en el cine nacional, sin embargo, parece que las películas comerciales, las cuales apuntan al gran público, le temen a su exposición y, se entiende, pero si el cine es en parte un reflejo de muchas realidades, ¿por qué no transgredir lo establecido en lugar de obedecerlo? "Straight", la nueva película del director Marcelo Tobar que llegó a las salas de cine esta semana, no parece enfocarse en demostrar la inclusión sino en su historia y personajes, hasta que los abandona en favor de lo habitual, de lo cómodo.
La película narra el triángulo amoroso entre dos hombres, Roberto (Alejandro Speitzer) y Cristian (Franco Masini), y una mujer, Elia (Bárbara López), quien es la novia de Roberto desde hace seis años, pero cuya relación es más superficial y formal que la sostenida con el amante. Desde el principio, se deja en claro la contradicción de Roberto, un hombre descubriendo una parte de su sexualidad que nunca se había atrevido a explorar, pero que siempre mantuvo en su conciencia.
En la sala de su departamento de Polanco, Roberto mira futbol americano y bebe junto a Cris, un chico que recién conoció a través de una aplicación de citas, pero que está más interesado en el sexo que los deportes y la conversación de Roberto. A la mañana siguiente, Elia irrumpe en el departamento mientras su novio limpia un rastro simbólico de cerveza sobre la alfombra. Esta escena es diferente a la anterior en varios puntos que refuerzan el subtexto de la historia, pero que, junto a la monótona cinematografía, tiende a caer en la repetición.
Mientras Ro habla y conoce a Cris, la cámara levita y se mueve rodeando a los dos hombres, remitiendo a la obra de teatro que adapta y a la química entre ambos, pero al estar con Elia, los cortes interrumpen su charla y su dinámica es distante, obstaculizada por muros, muebles y diálogos. Si ella habla de su trabajo como bióloga en un laboratorio, él responde con guiones prefabricados, sin embargo, con Cris, es él quien no para de hablar de su trabajo y aficiones. Son diferencias notorias en la forma, pero carecen de drama por lo artificial de los diálogos.
Si bien "Straight" no juzga a ninguno de los tres protagonistas, tampoco ahonda demasiado en sus identidades y su evolución como personajes. La tensión va creciendo y se genera el suspenso, pero en lugar de exponer a Roberto para que este acabe de una vez con su indecisión, el guion se acobarda y la dirección se acostumbra, entregando más de lo mismo, pese a contar con las piezas para decir algo más.
En ocasiones, los diálogos se extienden tanto que parece hablarles directamente al público, señalándolo por sus presuntos juicios contra la homosexualidad. Aunque reflexivas, son líneas artificiales que pertenecen al material didáctico, no a una película. Asimismo, la tensión expuesta a través de discusiones y riñas se rompe mediante chistes de golpe, terminando con los enfrentamientos naturales de estos individuos en favor del entretenimiento ligero.
Esta cobardía hace de la película una más en el tema de la homosexualidad, sin trastocar o transgredir los paradigmas al respecto.
La película mexicana de la temporada arribó a los cines de Monterrey a través de Cinépolis Distribución.
Director: Marcelo Tobar
Reparto: Alejandro Speitzer, Bárbara López y Franco Masini.