Kiev, Ucrania.- Después de haber reconquistado Izium –un núcleo importante por el abastecimiento de las tropas en la región de Járkiv y aledaños-, los avances continuaron y ya son 6.000 los kilómetros donde flamea la bandera de Ucrania, informó el presidente Volodimir Zelenski.
Hanna Malyar, viceministra de Defensa, afirmó que 150.000 personas ya habían sido liberadas. La funcionaria encabezó un acto en la plaza central de Balakliia, un punto de suministro militar obtenido a finales de la semana pasada, donde se izaron las banderas.
“El objetivo es liberar la región de Járkiv y más allá, todos los territorios ocupados por la Federación Rusa tan pronto como sea posible”, comentó. Malyar confirmó que esta contraofensiva desembocó en más de 300 localidades y más de 1.500 kilómetros retomados.
Posteriormente, en una publicación de Facebook, resaltó que esas son “cifras confirmadas”, pero que la extensión es “prácticamente el doble”.
Desde Kiev enfatizaron en que pelearán para expulsar de su territorio a las fuerzas rusas, envalentonados tras los triunfos en el noreste y los combates en el sur.
El gobernador ucraniano en Lugansk, Sergei Gaidai, manifestó que esperaba una ofensiva a gran escala allí, donde las victorias son escasas y los progresos lentos.
Por su parte, el Kremlin rechazó la posibilidad de una movilización general de la población a pesar de que retiran a las tropas del este, una acción que fue criticada por sectores que quieren una campaña más agresiva en Ucrania.
El portavoz ruso, Dmitri Peskov, dijo que no están hablando de ello “en estos momentos”. Un diputado crimeo del partido Rusia Unida, Mihail Sheremet, expuso que sin la movilización general las tropas no podrán cumplir los objetivos.
Los prorrusos aseguraron que las fuerzas rivales eran ocho veces mayores que las rusas y que debieron dejar atrás combustible y equipos militares.
En un discurso por redes sociales, Zelenski instó a Occidente a acelerar la entrega de sistemas de armas y que los aliados “fortalezcan la cooperación para derrotar al terrorismo ruso”.