La prensa oficial de Corea del Norte publicó por primera vez imágenes de una planta de enriquecimiento de uranio, en ocasión de una visita del gobernante Kim Jong-un al Instituto Nacional de Investigación de Armas Nucleares, en un lugar no revelado.
Es la primera vez que Corea del Norte ofrece detalles de sus instalaciones de enriquecimiento de uranio desde que el país llevó a cabo su primer test nuclear en 2006.
Estas plantas producen el uranio enriquecido necesario para el armamento nuclear haciendo girar a alta velocidad este elemento en centrifugadoras.
Según los medios oficialistas, Kim pidió construir más centrifugadoras para aumentar el arsenal atómico del país.
Imágenes publicadas por la agencia de propaganda KCNA muestran a Kim visitando una planta -sin que se especificaran la fecha y localización de las instalaciones- en compañía de Hong Sung-mu, una de las principales figuras del programa nuclear norcoreano, y recorriendo una sala en la que se ve una cascada de centrifugadoras de gas.
Durante la visita, Kim "destacó la necesidad de aumentar aún más el número de centrifugadoras para incrementar exponencialmente el número de armas nucleares para la autodefensa, de acuerdo a las líneas del Partido para desarrollar las fuerzas nucleares", explicó KCNA.
Kim, que visitó la sala de control de las instalaciones y fue instruido sobre su funcionamiento, "expresó gran satisfacción al ser informado de que la actual producción de material nuclear (para bombas) se está expandiendo firmemente" gracias al uso y desarrollo de tecnología norcoreana.
El líder ordenó mejorar aún más la capacidad de separación de las centrifugadoras e impulsar la introducción de un nuevo tipo de centrifugadora, cuyo desarrollo está en su etapa final, según KCNA.
Insiste en amenazas a la seguridad
Kim Jong-un, que también visitó las naves en construcción para albergar más centrifugadoras, volvió a insistir en que el actual panorama de seguridad para su país supone una "amenaza" y que eso exige mejorar las capacidades nucleares en términos defensivos y para lanzar ataques preventivos.
Hasta ahora el régimen norcoreano nunca había mostrado públicamente ninguna de sus instalaciones para obtener uranio-235, aunque había permitido a figuras como el científico estadounidense Siegfried Hecker visitar a principios de la pasada década un recinto en el Centro de Investigación Nuclear de Yongbyon (unos 100 kilómetros al norte de Pyongyang) que contenía unas 2.000 centrifugadoras de gas.