El movimiento libanés Hezbolá informó jueves que lanzó una serie de cohetes y drones contra posiciones del ejército de Israel, después que un importante comandante del grupo muriera esta semana en un bombardeo israelí.
Es uno de los ataques de mayor envergadura de Hezbolá contra posiciones militares israelíes desde el estallido de la guerra en la Franja de Gaza entre Israel y movimiento Hamás, considerado organización terrorista por varios países.
Desde entonces, los intercambios de disparos son casi diarios en la frontera entre Líbano y el norte de Israel.
Combatientes de Hezbolá, un movimiento aliado de Hamás, lanzaron "un ataque con cohetes y drones, dirigido contra seis cuarteles y sitios militares" y simultáneamente volaron "escuadrones de drones explosivos" contra otras tres bases israelíes, informó el movimiento chiita afín a Irán.
Taleb Sami Abdallah, alias Abu Taleb, murió con otros tres combatientes de Hezbolá en un ataque israelí que golpeó el martes 11 de junio a una casa en la que se encontraban en el pueblo de Juaiyya, en el sur de Líbano, según una fuente cercana al movimiento.
Una fuente militar libanesa indicó que Abu Taleb es el comandante "más importante de Hezbolá asesinado" desde que el movimiento chiita abrió un frente con Israel, tras el estallido de la guerra en Gaza.
Uno de los blancos fue la base israelí que Hezbolá afirmó que alberga los cuarteles de inteligencia "responsables por los asesinatos".
El ejército israelí informó que "cerca de 40 proyectiles fueron lanzados hacia Galilea y la zona de los altos del Golán" y precisó que la mayoría fueron interceptados, pero que otros provocaron incendios.
El portavoz del Gobierno israelí, David Mencer, dijo que su país "responderá con fuerza a todas las agresiones de Hezbolá".
Según la agencia de prensa nacional libanesa, aviones israelíes lanzaron en la noche del jueves un ataque contra una casa en Janata, un pequeño municipio al sur del país. La acción provocó la muerte de una "civil" y heridas en "otros siete civiles", agregó.
En las últimas semanas, la violencia en la frontera norte de Israel se intensificó. Hezbolá ha aumentado el uso de drones para atacar posiciones del ejército israelí, que ha respondido con bombardeos contra combatientes del grupo.
Alrededor de 470 personas han muerto en Líbano tras más de ocho meses de ataques transfronterizos desde el 7 de octubre, la mayoría combatientes, pero también unos 90 civiles.
Del lado israelí, al menos 15 soldados y 11 civiles murieron, según las autoridades. A ambos lados de la frontera, decenas de miles de personas tuvieron que abandonar sus hogares por las hostilidades.