Residentes de Lewiston, Maine se reunieron este fin de semana para rendir homenaje a la memoria de las víctimas del tiroteo de la noche del miércoles pasado, cuando un tirador identificado como Robert Card atacó un bar y un negocio de boliche en la ciudad.
La ciudadanía se reunió en la iglesia de la Basílica de San Pedro y San Pablo para guardar un minuto de silencio por las 18 víctimas del ataque, en uno de los peores tiroteos masivos de este año en Estados Unidos.
A la ceremonia acudieron mujeres con velos negros, quienes oraron por las víctimas y, junto a los funcionarios locales, organizaron una recaudación de fondos para asistir a las familias.
De acuerdo con medios y autoridades locales, el tiroteo ocurrido la noche del miércoles pasado y cuya persecución por parte de la policía duró dos días, es el peor tiroteo registrado en la historia del estado de Maine.
Fue la noche del viernes que el cuerpo de Robert Card fue encontrado por las autoridades, en un remolque de un centro de reciclaje de Lisbon Falls, luego de una presunta herida de bala autoinfligida.
Card también hirió a otras 13 personas durante el ataque.