El ataque a Donald Trump fue el mayor fracaso del Servicio Secreto, de acuerdo con su directora, Kimberly Cheatle, ante el Congreso de los Estados Unidos.
"Como directora del Servicio Secreto de Estados Unidos asumo toda la responsabilidad por cualquier fallo de seguridad", dijo Cheatle ante el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes.
Cheatle también recibió decenas de peticiones de renuncia por parte de los republicanos, quienes condenaron el actuar de los agentes durante el atentado contra su candidato.
Donald Trump sufrió un atentado hace poco más de una semana, durante un evento público realizado en Butler, Pensilvania, sitio donde recibió un disparo que le rozó la oreja.
Tras ello, Cheatle aseguró que la seguridad de los candidatos incrementó, subrayando que su misión "no es política", sino "una cuestión de vida o muerte".
Por otro lado, el director del FBI, Christopher Way comparecerá este miércoles ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, mientras los integrantes de la Cámara baja preparan un enlace directo hacia las investigaciones respecto al ataque.
Durante la sesión, James Comer, republicano e integrante del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, le pidió a Cheatle que renuncie a su cargo.
“Creo, directora Cheatle, que debería renunciar. El Servicio Secreto tiene miles de empleados y un presupuesto importante, pero ahora se ha convertido en el rostro de la incompetencia”.