No es por echarle mosca a nadie, pero ayer cuando calentaron las redes sociales Samuel García Sepúveda y Alito Moreno, protagonizaron una discusión en la que poco les faltó para decir: ''Tú lo serás''.
Aunque suene a broma, lo que sí se puede decir es, que el gobernador de Nuevo León y el dirigente nacional del PRI, sostuvieron un agarrón de alta tecnología, muy de moda por Internet.
Por lo que ya se imaginará como pudieran estar las cosas al momento, como para que ni uno, ni otro se quedara con nada guardado en plenas campañas, causando polémica en redes.
Y, con eso de que ambos tienen sus ciberseguidores, pues ya se imaginará más o menos, la clase de comentarios que se dejaron correr, por parte de quienes veían los toros desde la barrera.
Hablando de pleitos, como ya lo habíamos adelantado en éste espacio, los legisladores locales, para variar no sesionaron ayer.
Por lo que como siempre, no les faltaron las excusas para hacer acto de presencia, nada más de lejos sin entrarle a la chamba.
Sobre todo, por aquello de la elección de la Presidencia del Congreso a la que renunció Mauro Guerra, para dejarle el lugar a Ricardo Canavati.
Y, que en el caso de Movimiento Ciudadano, ante el agandalle del PRIAN, en señal de protesta no entraron a la sesión y tomaron asistencia.
Por lo que en el peor de los casos, argumentaron toda clase de situaciones exigiendo la toma de protesta a Rosaura Guerra.
Amén de señalar, que el PRIAN haya caído en desacato y que por esas cuestiones, los muchachos de Lalo Gaona se mantendrán en su postura.
Pero mientras sean peras o manzanas, el panista Carlos de la Fuente, ya admitió un importante rezago legislativo.
Hasta en cierta forma, el coordinador de los panistas, ya aceptó que los pleitos afectan el trabajo en el Congreso.
Y, que se tiene en el archivo muerto por lo menos más de mil 500 asuntos atorados, sin que se avance ni un poquito.
Por lo que al juzgar por lo que se ve, ni se tiene la más mínima intención de terminar con sus tareas, sino al contrario.
La guarda y custodia del control interno del Congreso, está más estancada que en el período del año pasado, así de ese tamaño.
Será el sereno, pero en el amanecer de las campañas políticas pese a los destellos, ataques o denuncias, hay un aspecto en común.
Aunque contados los ''detallitos'', a pesar de los gritos, los involucrados parecen no tener la piel tan delgadita, sacándole la vuelta a ciertos temas.
En especial aquellos que tienen que ver con señalamientos o que buscan subirlos al ring, por lo que se aprecia muy marcada madurez.
Por lo que hasta en cierta forma se podría decir, que esto habla de una contienda de altura, aunque nada, nadita de nada, se garantiza.
De modo que, no hay más que pelar el ojo y parar oreja, porque dicha ''armonía'' pudiera alborotarse, como dice la raza, en un dos por tres.
Que el asunto de la asignación de las candidatruras, trae a más de dos con las orejas coloradas y casi, casi sin dormir.
Especialmente, porque morenistas que se dicen de hueso colorado, afirman que tenían derechos por su trabajo y los eliminaron.
Que en el peor de los casos, las candidaturas o espacios disponibles, se las dieron a ex emecistas o del Partido Verde.
Ante lo cuál, amagan con buscar la forma de descarrilar a quienes ya traen las candidaturas en la bolsa.
Por lo que no nada más amagan con sacar los trapitos, sino probar ante la autoridad que no cumplen con los requisitos.