Así como en la canción de los Tigres del Norte, a “Pedro pueblo”, nos borraron la sonrisa con las nuevas medidas del “tapabocas” que pensábamos superado. Sin decir “agua va”, la Secretaría de Salud del Estado, a media mañana y de manera sorpresiva nos pedía que en lugares cerrados: “No peláramos más los dientes”. Cero sonrisas.
Aunque otros aún con cubrebocas sonreían y se les notaba, debido a que con esta medida se oficializaba “el puente Guadalupe - Reyes”, ya que, para algunos trabajadores del estado, debido a los posibles nuevos brotes de COVID, les adelantaban sus vacaciones después del 12 de diciembre, día de nuestra virgencita de Guadalupe, ¿Habrá que agradecerle a ella el milagro?
Tenemos que decir que los mal pensados dicen que lo que hay que agradecer en este cierre de algunas dependencias de gobierno, es al pleito entre el congreso y el poder ejecutivo, en donde está en disputa la aprobación del Fiscal (vetado el proceso de selección) y por “la danza de los dineros”, por el presupuesto del siguiente año, están jugando a las vencidas los legisladores y el gobierno del estado. “Entre políticos te veas”.
Y hablando de políticos, en el gobierno a nivel federal, muchas sonrisas se borraron al pasar la ley que reforma el INE, en el Senado de la República, la oposición sufrió otra derrota y no solo “moral”, el inquilino de Bucareli se aplicó al ver que el pastor de su rebaño se iba en contra de los designios que venían del Palacio Nacional. “Los López”, le borraron la sonrisa a Monreal y no precisamente con un tapabocas.
En esta misma semana quisieron ponerle un tapabocas al subsecretario de seguridad federal, Ricardo Mejía, que después de que dieron los resultados de la “encuesta” por parte del partido Morena, para elegir a su candidato a la gubernatura de Coahuila, lo dejaron fuera de la misma, dando el triunfo al senador Guadiana, por lo cual Mejía, se queda como dirían los clásicos: “chiflando en la loma”. Pataleó, no se tapó la boca, salió a decir que no estaba de acuerdo con el resultado de la encuesta, salió a decir un mensaje con una cara desencajada y por supuesto con su sonrisa borrada.
Ojalá que entre tanto ruido en la política y que se anuncia que en los días de Navidad, vendrá un viento helado del norte, y a pesar de que nos obligan a usar el tapabocas, esperemos que nos llegue un buen aguinaldo, tengamos salud y podamos estar en familia para que nos se nos borre la sonrisa.