"La respuesta más rápida es la acción"
Proverbio americano
Equivoca total, rotunda y estrepitosamente su respuesta el alcalde de San Pedro, Miguel Treviño, ante el asesinato de un hombre en el restaurante de un hotel en plena tarde del domingo y falla porque su respuesta no es la que mínimamente esperan los habitantes de ese lugar.
Para los sampetrinos la seguridad no es una prioridad, es "la prioridad" y no sólo quieren ver pasar a cada rato por su casa a la patrulla limpia y bonita, sino que de verdad quienes están a cargo de su protección velen por su integridad física y su patrimonio y eso, hoy, no está ocurriendo.
Dentro del marco que engloban los servicios públicos que brinda el Municipio, además de la limpieza, recolección de basura, pavimentación, alumbrado público, parques y jardines, la seguridad es el tema número uno y si Miguel Treviño llegó como candidato independiente a la presidencia municipal se debe, en mucho, a que lo "vendieron" como un especialista en seguridad.
Salir con que el asesinato de un hombre del domingo se enmarca en el contexto nacional no es respuesta para quienes viven en San Pedro. ¿Cómo pueden acudir a comer, de compras o simplemente pasar por ahí cualquier día si de manera impune un pistolero llega al lugar, cruza el lobby, se introduce al restaurante, llega hasta la mesa y a distancia dispara sobre la víctima para después acercarse a rematarlo y salir tranquilamente hiriendo de paso a otras dos personas?
"Es que sucedió en una orilla de San Pedro", dice Miguel, pero su responsabilidad llega justamente hasta el límite de esa orilla y debe cuidarla como debe cuidar la orilla contraria. "Es que ya aportamos los videos del hotel y de las cámaras del municipio", ¿y eso, de qué sirvió si no detuvieron en flagrancia al homicida?
Ah, pero eso sí, ayer por la noche para terminar de emproblemar nuestra caótica vialidad, el alcalde ordenó la instalación de filtros en diversas avenidas, estrangulando la circulación que normalmente viaja a vuelta de rueda.
No Miguel, los sampetrinos no quieren explicaciones ni pretextos, quieren resultados y cada vez que ha ocurrido un hecho similar, lo único que obtienen son eso, discursos, palabras vanas, huecas.
Damnificada de la falta de acción, estrategia y rumbo de Treviño, la aspirante independiente a sucederlo en el cargo, Vivianne Clariond, se mantiene en el mismo discurso del alcalde al ser presidenta de la Comisión de Seguridad del Cabildo, pero a estas horas ya debe estarse arrepintiendo por el tropel de reclamos que seguro ha recibido.
Si verdaderamente quiere hacer un papel digno en los siguientes comicios, Vivianne tiene que deslindarse de Miguel y atender con seriedad el tema de la seguridad y, como en el caso de los alcohólicos y los drogadictos, el primer paso para recuperarse es aceptar que están mal y buscar ayuda.
Bien o mal, a Mauricio Fernández se le alinean los planetas porque de siempre la seguridad ha sido su estandarte y ante lo sucedido sólo tiene que salir a cuestionar y proponer cualquier medida y eso es lo que está haciendo, porque justa y precisamente es lo que esperan los habitantes de San Pedro.
La de Miguel sigue siendo la respuesta más errónea.