Por si quedaba alguna duda, el secretario general de Gobierno, Javier Navarro, ya le mandó decir a los diputados del PRIAN y a los alcaldes que no habrá de piña.
Que si esperaban el reparto de los recursos que forman la bolsa de los dos mil 500 millones de pesos se quedarán como el chinito, por lo vale agarrar asiento, lugar y tabla.
Así que agárrese porque puede apostar doble contra sencillo, que las partes en conflicto tendrán que hacer de tripas corazón hasta que el tema se solucione tarde o temprano.
Toda vez que la bola está en posesión de una autoridad federal que aún analiza el caso de tira-tira y podría resolver según su criterio, tan pronto como se pueda.
Pero si Javier Navarro rompió el silencio ante la exigencia del panista Carlos de la Fuente, advirtiendo que no entregarán nada a los municipios, algo habrá de saber.
Luego de algunos días en que Carlos Alatorre Cejudo, Director General del Organismo de Cuenca Río Bravo de la Conagua; Juan Ignacio Barragán, director de AyD; y Hernán Villareal, titular de Movilidad, anunciaron el desmonte "selectivo" del río Santa Catarina, se vislumbra un alternativa.
Por lo que ayer el secretario de Medio Ambiente de Nuevo León, Félix Arratia, habló sobre el particular, señalando a través de un video que hizo circular, que se conservará la flora y la fauna, por lo que vale ver de qué se trata.
Sobre todo cuando en el primer aviso encabezado por el funcionario federal dijo que el proyecto comprende cien millones de pesos para el desmonte de 25 kilómetros y que a los días, ya se había devastado un amplio tramo del cause.
Lo que sí podemos señalar es que después de la devastación total de un amplio espacio del río Santa Catarina, los trabajos con maquinaria pesada, que agarró parejo, se paralizó.
Tan es así que ante la presencia física de ambientalistas que acudieron a supervisar el área desmontada, se percataron que desde el lunes pasado no hay quien opere la maquinaria.
Amén de que empleados enviados para colorar cintillas amarillas de selección de los árboles a proteger, no pudieron colocarlas, pues el área ya estaba desmontada.
Por lo que los trabajadores comisionados para esa tarea se retiraron del lugar con los rollos de cinta amarilla en sus manos. Vaya, como se diría, así como llegaron se fueron.
No nos gusta el chisme, pero con eso de los calores le podríamos decir que la cifra de fallecimientos por golpes de calor es más alta de lo que se decía.
Al menos así se maneja de manera extraoficial y que coincidiría con los números dados a conocer hace algunos días por las autoridades federales de Salud.
Por lo que vale esperar la aclaración por parte de las autoridades de Nuevo León, sobre todo para ahora que se vislumbran temperaturas de 40 grados.