La movilidad en Nuevo León

En todo acceso se tiene los cuidados protocolarios dictados por Salud, pero el tumulto es impresionante

La movilidad en Nuevo León, a días de la Navidad es impresionante por donde quiera que se le vea.
Es más hasta diera la impresión que hay más gente en la calle, que antes de la propia Pandemia.
Pero ahora, las personas usan cubrebocas, en otros casos no, se aplica gel y se toma la temperatura.
En todo acceso se tiene los cuidados protocolarios dictados por Salud,  pero el tumulto es impresionante.
Personas de todas las edades, jóvenes, adultos, embarazadas, vaya familias enteras como antes.
Por lo que vale seguir con la guardia bien puesta, porque los descuidos salen ''caros''.
Y, ahora que ya se tiene el fantasma de la nueva variante de la Ómicron, valen los cuidados.


Con eso de que las autoridades estatales se han visto incompetentes en eso del combate a la contaminación, no descarte hagan uso de algunas ''herramientas'' para lavarse las manos.
Sobre todo, porque de un tiempo a la fecha las Alertas Ambientales siguen y siguen, lo mismo que las fallas en las unidades de monitoreo, que un día operan y otro casualmente se descomponen.
Pues bien, como no se han aplicado acciones para regular las altas emisiones en la entidad, no faltará quien ahora diga que todo se debe al incremento de la movilidad y la mala calidad de las gasolinas.
Pero como no nos gusta el chisme, hasta ahí se la dejamos, porque para excusas y pretextos recuerde que tiempo atrás, ya se usó un respuesta más o menos similar por autoridades de Nuevo León.


Aunque las propias autoridades responsables de Salud esperan la llegada de la Cuarta Ola, es cierto que los contagios son hasta cierta forma benévolos.
Comparados con tiempos críticos hay mucha, pero mucha diferencia, pero de igual forma no han desaparecido, lo cuál indica que la Pandemia aún existe.
Y, que las estadísticas no nada más nos sirven para conocer la percepción de lo que sucede en ese sentido, sino para recordar que el riesgo es fatal.
Si disminuye el número de personas hospitalizadas, no quiere decir que todos hayan sido dados de alta, pues también hay fallecimientos, así de simple.
Así que ojo, porque a pesar del avance importante en torno a la vacunación, no se puede medir la carga viral de las víctimas, vacunadas o no vacunadas.

No se lo digan a nadie, pero dicen los antreros que las autoridades de Salud luego de detectar negocios violentando reglamentos andan más bravos que nunca.
Que por un lado dicen tener ya la visita continúa de inspectores estatales y de empleados municipales para revisar entre otras cosas los aforos y cierres.
Y, que ante el registro de sanciones y clausuras, quienes corrieron con mejor suerte, prefieren andar bien portaditos porque el miedo no anda en burro.


Ayer, los participantes de la Marcha por el Orgullo y la Dignidad realizada de manera simultánea en el país, por calles de Monterrey, recordó aquella que se realizó hace años.
En aquel entonces, personas con alguna discapacidad tomaron del mismo modo las calles, para protestar por el cierre de algunas de las instalaciones que les daba servicio.
Los quejosos lamentaron las decisiones de las autoridades, que les cerraron las puertas a instalaciones deportivas recreativas y que los dejaron marginados.
Y, que ahora aunque son otros tiempos, el común denominador sigue siendo el mismo, un llamado a la reflexión y a considerar que igual que todos, tienen derechos.