La inteligencia emocional le permite a las personas reaccionar de manera adecuada en situaciones de estrés de diversos tipos, les permite ser empáticos y a controlar sus emociones más complejas.
Controlar las emociones no significa anularlas, pero si manejarlas. Lo primero que necesitamos reconocer es que yo tengo emociones y la otra parte también, incluso sobre el mismo problema a resolver, y podemos tener diferentes perspectivas.
Validar las emociones de los demás nos permite llegar a un punto medio donde podamos construir una solución buena para ambas partes.
¿Cómo podríamos los humanos entendernos si no escuchamos a los demás?, Claro que es muy posible una diferencia de opiniones o varias, pero no debemos cerrarnos al diálogo.
Un funcionario de alto nivel comenzó a bloquear a personas de sus redes sociales un día que tuvo una mala respuesta emocional a una situación de estrés, pero es conocido que los funcionarios deben garantizar el derecho a la información de las personas.
¿Cómo las y los funcionarios pueden encontrar el punto medio entre la garantía a la información y su tranquilidad mental? Bueno, podrían auxiliarse de los equipos de comunicación de las secretarias, pero teniendo claridad de que una diferencia de opiniones puede generar grandes respuestas a los problemas. Por eso existen las mesas de trabajo, los foros, los encuentros, justo para generar intercambios de ideas.
Mandar obedeciendo, es una frase fácil de pronunciar; sin embargo, es algo difícil de cumplir. Lo primero es leer o escuchar a los ciudadanos, lo segundo tener la voluntad política de atender las peticiones que se escuchan.
Más allá de las limitaciones presupuestales o técnicas, escuchar puede mejorar mucho la relación del gobernante con el gobernado.
A veces las redes sociales nos engañan con sus algoritmos, pero lo único real es andar en las calles, de preferencia con los que no son tus amigos o tu círculo cercano, con quiénes no te van a adular o aplaudir. Escuchar a otros genera más que hablar. Escuchar es la única forma de no asumir y respetar, de validar al otro, al que es diferente a mi, de aceptar la otredad. Es la única forma de crear comunidad. Y de mantener a la comunidad feliz.
Invito a las y los funcionarios a no bloquear, a no agredir a otros, a dialogar por el bien de Nuevo León. Y claro, a garantizar el derechos la información.