Del 2007 al 2009 el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) catalogó al Área Metropolitana de Monterrey como la más contaminada de América Latina. Del 2010 al 2014 la Organización Panamericana de la Salud (OPS) la ubicó como la urbe con mayor contaminación atmosférica del país. Del 2015 al 2018 la Organización Mundial de la Salud (OMS) dio a conocer un informe donde los municipios conurbados eran los más contaminados del continente americano.
Aunque cada gobierno estatal en turno ha rechazado que nuestra Metrópoli sea la más contaminada, el pasado fin de semana siete municipios encabezaron el ranking mundial del Air Quality Index, indicador que reporta en tiempo real la polución del aire de todas las ciudades del orbe.
Por ello y debido a que la contaminación rebasó 10 veces el límite de la Norma Ambiental Federal y hasta ¡50 veces! los parámetros de la OMS para partículas PM10 y PM2.5, la Secretaría de Medio Ambiente emitió la primera alerta ambiental del año desde el pasado viernes 12 de enero hasta la fecha.
Ante la mortal gravedad para la salud pública, el jueves 11 de enero la Secretaría dio a conocer las acciones del Plan Integral de Gestión Estratégica de la Calidad del Aire (Pigeca), elaborado con base en los derechos ambientales establecidos en la nueva Constitución de Nuevo León.
Si bien con el Pigeca se buscan sentar las bases para una nueva relación responsable entre los sectores público, privado, civil y ciudadano con el medio ambiente, no exageramos en decir que en cualquier momento se podría emitir la declaratoria de ¡hoy no respire! mientras tal corresponsabilidad no exista.
Para reestablecer la calidad del aire es fundamental llevar a cabo las acciones corresponsables del Plan Maestro del Pigeca, donde las autoridades ambientales federales, estatales y municipales deben ponernos el ejemplo en:
Las acciones sobre la Refinería de Pemex en Cadereyta, por ser la industria que más contamina y que falta incluir en el Pigeca, para:
° Control de emisiones de PM10, PM.2.5 y dióxido de azufre.
° Suministro de gasolinas y diésel de ultra bajo contenido de azufre.
° Instalación de sistemas de recuperación de vapores de gasolinas.
Las acciones relativas al autotransporte:
° Aumentar la flota de vehículos eléctricos de pasajeros y de carga.
° Fortalecer y atraer el primer clúster de electromovilidad.
° Programas de mantenimiento y de afinación vehicular.
Las acciones referentes en cuanto al programa Muevo León:
° Construir tres nuevas líneas de Metrorrey y rehabilitar la Ecovía.
° Reestructurar transporte público con más de 2 mil unidades nuevas.
° Construcción del Nuevo Periférico para desviar tránsito de carga.
Las acciones de reforestación:
° Sembrar más de un millón de árboles nativos durante el sexenio.
° Adquisición de maquinaria y equipo para reforestación masiva.
° Campañas de adopción de árboles nativos y de “Evita Fuegos”.
Las acciones de Gobernanza Sostenible:
° Firma del Pacto por la Calidad del Aire.
° Acuerdos con la Federación para regular empresas paraestatales.
° Acuerdos con los municipios para pavimentación de vialidades.
° Prohibir la comercialización de carbón vegetal de mezquite.
Las acciones para una industria competitiva:
° Acuerdos para el desarrollo industrial de bajas emisiones.
° Acuerdos y sanciones para reducir las emisiones de las pedreras.
Las acciones en materia de educación ambiental:
° Cursos a docentes y estudiantes para reducir la contaminación.
° Campañas permanentes de reforestación de escuelas y áreas verdes.
Aunado a las anteriores acciones, urge crear la Agencia de Calidad del Aire como órgano descentralizado, técnico y autónomo para vigilar y sancionar a quien contamine y, sobre todo, para dejar de respirar aire sucio.
Estaremos atentas al cumplimiento de las acciones contra el aire sucio que el Gobernador prometió, porque Nuevo León necesita con urgencia medidas contundentes que impacten en la calidad del aire.