Imagínese usted, apenas va comenzando el año, escasos 15 días se han consumido de este 2023 y resulta que este lunes, el tercer lunes del mes de enero ¡es el más triste del año!
No lo digo yo. Resulta que un especialista de la psicología, Cliff Arnall, realizó un estudio por allá del 2005 para determinar la fecha más triste de todo el año y zas, resulta que es el tercer lunes de enero, por aquello de que todos tenemos algo así como la “cruda” de tanta fiesta, la enorme cantidad de gastos y por ende, de deudas; vulgo lo que en México tenemos bien conocido como la “cuesta de enero”.
Vale aclarar que las fórmulas utilizadas por el especialista en comento, han sido bastante criticadas, pero la fecha como tal, es decir, el día más triste, se quedó como efeméride curiosa.
Bajo mi particular óptica, cualquier lunes puede ser un #bluemonday o #diamastriste, ahora sí que como se dice coloquialmente, depende de cómo le va a cada cual en la feria.
El día más triste para una persona puede ser la fecha en que pierde a un ser querido, el día que lo desocupan de un empleo, el día en que sufre un accidente o le diagnostican una terrible enfermedad ¿no lo cree usted? Y puede ser un lunes, o un jueves o un sábado. Puede ser el día primero, el diez, el 13 o el 20.
Seguro si supiéramos que equis o ye día será nuestra más triste fecha del calendario, buscaríamos burlarla de algún modo, pero no hay tal.
Le comparto que, así como existe el #diamastriste, está su opuesto, es decir, el día más feliz del año, al cual se le conoce como el Día Amarillo, y que según los astrólogos y psicólogos es el 20 de junio, al coincidir con el solsticio de verano.
Y se le dice #yellowday porque este color se asocia con el aumento de la temperatura y de la cantidad de horas luz.
Yo podría diferir con el día más feliz y tengo mi particular razón para decirlo, pero bah, no pasa de un mal rato.
El día más feliz puede ser, para una pareja, el día en que contraen nupcias (o firman su divorcio); para una madre, el día en que nacen sus hijos; el día en que se hace un maravilloso viaje o se logra la independencia económica, un mejor empleo; las posibilidades son infinitas.
Si bien no necesariamente todos tenemos 24 horas completas como para decir que es nuestra fecha “más feliz”, al menos busquemos tener episodios, momentos, instantes, bonitos en nuestro día a día.
El #bluemonday o el #yellowday están bien como fechas simpáticas del calendario, pero no hay que tomárselos tan a la tremenda.
Y para no desentonar con la tendencia de la semana, si usted tiene un Twingo, un democrático vochito o un fabuloso Ferrari; o si es el feliz poseedor de un Casio o un Rolex, lo mismo da, siempre que lo aprecie, lo disfrute, lo aproveche y por supuesto, lo haga feliz.