AMLO quiere su Constitución

Para los políticos aferrados en trascender en su autoritarismo, siempre está la tentación de cambiar por cambiar o para imponer una agenda política

El 107 aniversario de la Constitución Mexicana fue conmemorado por el Presidente con la presentación de un paquete de 20 reformas a nuestra Carta Magna en un evento en Palacio Nacional. Al tradicional y solemne acto en Querétaro que reúne a los poderes del Estado no asistió para poner "su sello" de la 4T y de paso se ahorró la incomodidad que le representa la presencia de los titulares de los representantes de los poderes legislativo y judicial.

Justamente hace un año, la presidenta de la Suprema Corte de Justicia, Norma Piña, no aplaudió ni se levantó cuando llegó AMLO al evento; desde entonces, la ministra no ha sido invitada a ceremonias protocolarias de la presidencia. 

Es el primer mandatario que no asiste a la ceremonia desde 1917. En su lugar estuvo Luisa María Alcalde, secretaria de gobernación, representantes del poder legislativo y el Ministro Alberto Pérez Dayán como representante del Poder Judicial en sustitución de la ministra Pina.

"Yo voy a ir a Querétaro antes...vamos a llevar a cabo en Querétaro una reunión del gabinete de seguridad y una conferencia para que no se sienta que no voy a estar, voy a estar antes, pero quiero que el acto para dar a conocer las iniciativas de reforma a la Constitución se lleve a cabo en el recinto donde se aprobó la Constitución Liberal de 1856-57, porque considero que es un recinto histórico", afirmó AMLO.

El mensaje del Ministro Pérez Dayán, a quien Morena pide llevar a juicio político, fue muy directo en cuanto a las pretensiones de cambio al poder judicial que propone el presidente.

"La esencia misma de las magistraturas es muy distinta de la función social que ejerce el representante político. Hay que alejar al Poder Judicial de la política...militancia y judicatura no son afines", expresó. 

"Es precisamente la Constitución federal, esta que ahora conmemoramos, la que da a la Suprema Corte de Justicia de la Nación las facultades suficientes para invalidar cualquier acto que no la respete, independientemente de la fuente de la que provenga, electa o no electa, sin distinción alguna.

"Bajo estas ideas debemos coincidir todos, considerando que los tres Poderes de la Unión, y sus integrantes, cualquiera que sea su origen, son democráticos al surgir precisamente del propio estamento constitucional: aquí ninguno es más democrático que el otro...por encima de la Constitución no hay poder alguno, nada ni nadie", expresó el Ministro.

Y es que AMLO en repetidas ocasiones ha descrito al poder judicial como "podrido" y pretende una reforma integral que plantea la reducción y renovación del pleno de ministros de la Suprema Corte en una elección extraordinaria que tendría lugar en el 2025 mediante el voto popular.

La propuesta del presidente considera también la desaparición del Consejo de la Judicatura Federal y crear en su lugar un Tribunal de Disciplina Judicial, que sancione a ministros, magistrados y jueces. El fundamento es que actualmente la presidenta de la Suprema Corte preside también el Consejo de la Judicatura. AMLO señala que tanto el presidente de la Suprema Corte, así como los consejeros de la judicatura "no necesariamente cuentan con las herramientas, aptitudes e independencia necesarias para cumplir con las enormes responsabilidades de un órgano tan relevante para el funcionamiento adecuado del poder judicial de la Federación".

Entre las iniciativas que presentó AMLO, además de la renovación del Poder Judicial, está la reforma electoral, un nuevo sistema de pensiones, la desaparición de los organismos autónomos y el planteamiento de que la Guardia Nacional forme parte de la Secretaría de la Defensa Nacional. 

"...todo eso lo vamos a presentar en la Cámara de Diputados para reformar la Constitución, porque me quiero ir más tranquilo todavía, más contento, y cuando yo termine decir: misión cumplida", señaló el presidente.

AMLO quiere SU Constitución. Sus propuestas equivalen a una nueva nación. Sin embargo, no se requiere cambiar La Constitución para tener "el humanismo" que pretende AMLO, lo que se necesitan son acciones que el actual gobierno no ha realizado y demostrar capacidad de gobernar para asegurar a los mexicanos servicios de salud, educación y calidad de vida en entornos seguros. Sin violar los derechos humanos, con transparencia de información y manejo de recursos. 

Si hay algo que nos une a los mexicanos es La Constitución, es nuestro documento comunitario que se debe cuidar y predicar con hechos y con la palabra. Sin duda, tiene muchas áreas de oportunidad, de ahí las enmiendas, pero lo que no queremos es que sea violada ni mucho menos cambiada de la forma que propone AMLO.

La Constitución debe salvaguardar la dignidad y derechos de los mexicanos en el respeto, democracia, igualdad y justicia, de ahí que lo que más nos preocupe sean los temas electorales, la igualdad de poderes, la aplicación de la justicia, la transparencia, y funciones de los organismos autónomos como reguladores del poder.

Para los políticos aferrados en trascender en su autoritarismo, siempre está la tentación de cambiar por cambiar o para imponer una agenda política. El presidente sabe que no tienen los números en el Congreso para aprobar una reforma constitucional de esta naturaleza, sin embargo, su objetivo es intervenir en la campaña presidencial y reactivar la polaridad de opiniones con fines electorales. Sean aprobadas o no, las reformas propuestas dominarán la agenda del legislativo durante el último periodo que concluye el 30 de abril próximo y será el plan de campaña de la Sheinbaum.

"Hacer cumplir la ley es uno de los actos democráticos más genuinos del servicio público. Defender a la Constitución es defender al pueblo mismo...", expresó Pérez Dayán.

Leticia Treviño es académica con especialidad en educación, comunicación y temas sociales, leticiatrevino3@gmail.com