Al revés

Tiene razón mi admirado "Perico Polico" cuando dice que a México lo podría haber inventado Kafka

"La verdad es lo que es, y sigue siendo verdad aunque se piense al revés"

Antonio Machado

Tiene razón mi admirado "Perico Polico" cuando dice que a México lo podría haber inventado Kafka.

Y es que solamente así se puede comprender el hecho de que en pleno Siglo XXI, cuando miles de seres humanos luchan para encontrar formas y métodos que nos permitan evitar continuar contaminando nuestro planeta, nuestras autoridades se empeñen en hacer las cosas exactamente al revés de como deberían realizarlas.

No alcanzo a entender el por qué el gobierno no impulsa la venta de autos que no emitan contaminantes al ambiente; ya avanza el proyecto de "Olinia" el auto mexicano de bajo costo, pero este aún sigue en prototipo y no comienza a fabricarse. Así, sinceramente pienso que el gobierno debería encontrar fórmulas que permitiesen reducir el costo de los vehículos ya existentes para incentivar su uso.

Ateniendo esta lógica, en Nuevo León desde 2024 se decretó que los vehículos eléctricos y los híbridos no pagarían refrendo, este derecho estatal que únicamente sirve para mantener actualizado el padrón vehicular y que te da el derecho de portar las placas que debes pagar por tener.

Ahora, de la nada, el Gobierno estatal sale con que retirará esta condonación, bajo el increíble argumento de que todos los vehículos utilizan la infraestructura urbana y de inmediato salta la pregunta, ¿cuál infraestructura si la zona metropolitana es un macrocaos en materia de movilidad?

Esa infraestructura está a cargo de los Municipios que pagan la pavimentación y mantenimiento de calles y avenidas. Actualmente no hay ninguna obra en proceso a cargo del Estado para resolver la crisis que hoy padecemos y que no me salgan que las carreteras Interserrana o la de la Gloria-Colombia, porque esas muy pocas personas las usan.

Entendamos de una buena vez, nadie se bajará de su coche para utilizar el transporte urbano, así acaben las dos líneas del Metro que se están construyendo y traigan otros cuatro mil camiones. Para resolver el problema del transporte urbano falta mucho, pero sobre todo falta voluntad de hacerlo.

Entonces, ¿por qué castigar a quien haciendo un esfuerzo adquiere un vehículo más caro que no funciona con gasolina y que contamina menos?

Los intentos por implementar revisiones físico-mecánicas a autos particulares han fracasado o han terminado por ser modas pasajeras, porque desde hace mucho dejaron de verificar el estado de los taxis como lo hicieron durante un breve lapso. No existe en Nuevo León una verificación vehicular, de manera que aquí el rasero medirá ahora por igual a quienes ayudan a un ambiente más limpio que a quienes contaminan al no darle mantenimiento a sus muebles.

Si el argumento del Gobernador al hablar de los nuevos camiones es que no contaminan, ¿por qué sus funcionarios ahora pretenden castigar a los automovilistas que tienen vehículos que tampoco contaminan cobrándoles el refrendo? Yo no entiendo.

Visto lo anterior bajo la perspectiva de la estrategia electoral rumbo al 2027 el asunto termina siendo un balazo en el pie, ya que como el incremento al Impuesto Sobre Nóminas, acabará acarreando enormes animadversiones que serán determinantes en las urnas.