Tendrá Presupuesto 2021 ‘sello Covid-19’

El presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública adelanta que serán una prioridad a pesar de que la cobija del gasto público será limitada

El gasto en salud y la vacuna contra Covid-19 marcará el presupuesto 2021, dice el diputado Erasmo González Robledo.

En entrevista el presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública adelanta que serán una prioridad a pesar de que la cobija del gasto público será limitada.

No será un presupuesto inercial, estamos ante un escenario complejo y con poco margen de maniobra, advierte al decir que el Congreso tiene que estar a la altura de las circunstancias.

Cumplir el compromiso laboral con el personal de salud y no repetir errores de crisis pasadas cuando se endeudaba al país y se planeaban y aprobaban proyectos que tardaban en arrancar.

El legislador por Morena comenta que las negociaciones del presupuesto serán presenciales, bajo estrictas reglas sanitarias.

Para ello, comenta que en San Lázaro se hacen las adecuaciones para trabajar en el Pleno y que se instalen las mesas de trabajo al interior de la Comisión de Presupuesto, a fin de hacer el análisis y aprobación del proyecto de gasto que envíe el Ejecutivo el domingo 6 de septiembre.

El contador público y auditor egresado de la Universidad de Tamaulipas y Maestría en Ciencias Políticas y Administración Pública reconoce que hay un escenario difícil por el impacto económico de la pandemia.

Por eso afirma que será uno de los presupuestos más complejos que se negociarán y el último que apruebe la actual legislatura LXI; por eso van a trabajar desde el primer día en que llegue el Paquete Económico 2021.

En opinión del exalcalde de Ciudad Madero, Tamaulipas, no es buen momento para tratar otros asuntos como cambios a la Ley de Coordinación Fiscal.

Si bien es válida la propuesta de gobernadores para reformar el Federalismo, opina que hoy lo urgente es el tema de la salud.

PRIMERO LA SALUD

Pone de manifiesto que durante las negociaciones se enfatizará la importancia de los servicios de salud del próximo año, y mantener la plantilla de más de 45 mil trabajadores contratados de manera temporal.

Se deberán contar con más recursos para ampliar las instalaciones hospitalarias y al tiempo dotar no sólo de medicamentos a la población y al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) y otras instituciones, también estar pensado en el costo de las vacunas para 2021, acota.

Además, otros elementos importantes para darle continuidad a lo que hoy es un derecho Constitucional, consagrado en el artículo cuarto, que son los programas de bienestar.

Es decir, explica, garantizar apoyos a adultos mayores, becas a jóvenes, a niños y niñas, y atención no sólo en educación sino reiterar el tema de salud, seguridad y fortalecer el Insabi, la Guardia Nacional, y diferentes sectores productivos; tampoco olvidar infraestructura.

Comparte la idea del secretario de Hacienda, Arturo Herrera, sobre la importancia una alta absorción de recursos para que se puedan ejecutar los proyectos que ya están en marcha.

El legislador establece que estarán atentos a lo que se plantea en materia de crecimiento, plataforma petrolera y tipo de cambio, porque pese a que se está reabriendo la economía con algunos signos de recuperación, aún hay que ser precavidos.

Mejoría en indicadores no significa recuperación

La reapertura de los diversos sectores de la actividad productiva permitió resultados favorables en los indicadores, pero no significa una recuperación, expuso el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

En el Análisis Económico Ejecutivo semanal, el organismo detalló que hay varios factores que inhiben el crecimiento de la actividad a pesar del repunte de la producción industrial y de que aumentó la población ocupada.

“La mermada confianza, la incertidumbre para la inversión y la debilidad y precariedad del mercado laboral, entre otros, sin duda seguirán siendo factores de inhibición para el crecimiento.

“La evolución de la inversión y el consumo depende de la confianza y de la certidumbre en el Estado de derecho, y hasta el momento no hay señales de avances en esas líneas sino más bien al contrario”, argumentó.

Para el CEESP, el reinicio de las actividades tras el confinamiento permitió que se registrara mayor empleo y aumento de la actividad productiva, pero no se puede decir que se ve una recuperación a los niveles de 2018 o 2019.

Por ello, el organismo apuntó que “es pertinente insistir en que esto sólo refleja los resultados de la reapertura”, por lo que no se puede generar una percepción “demasiado optimista”.