El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que "no es tan complicado gobernar" México, pues aseguró que aplica una fórmula muy sencilla para hacer un buen gobierno: no permitir la corrupción ni los lujos y todo lo ahorrado destinarlo en beneficio del pueblo.
Al inaugurar una sucursal del Banco del Bienestar en Culiacán, Sinaloa, y acompañado por el gobernador Rubén Rocha Moya (Morena), el presidente López Obrador aseguró que gracias a la política económica que ha aplicado su administración se está reduciendo la pobreza y la desigualdad económica en nuestro país.
"Miren no es tan complicado gobernar como algunos piensan. Nosotros aplicamos una fórmula muy sencilla para hacer un buen gobierno: primero, desterrar la corrupción, pañuelito blanco, no permitir la corrupción, que nadie se quede con el dinero que es el del pueblo, el presupuesto no es dinero del gobierno, es dinero del pueblo; segundo, no permitir los lujos en el gobierno".
Señaló que en sexenios pasado se destinó presupuesto para pagar pensiones millonarias para expresidentes y pagar muchos lujos para la "burocracia dorada" y con todo lo que se ahorro, indicó, se está logrando atender al pueblo.
"Ahora con esa fórmula sencilla hemos liberado mucho presupuesto en beneficio el pueblo. La mayoría de los hogares de México reciben, aunque sea una pequeña parte de ese presupuesto público. De 35 millones de familias que hay en nuestro país, de manera directa reciben apoyo 30 millones de familias.
"Y los otros 5 millones también se benefician porque si le va bien al de abajo si mejoran los ingresos de la gente trabajadora, si mejoran los salarios, la gente tiene para comprar, no solo lo básico también otras mercancías y eso hace que pueda florecer el comercio, la industria. Eso es lo que está sucediendo", dijo.