Sin achicarse por el amago de la Secretaría de Hacienda (SHCP) y la descalificación de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, los trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) continuaron este viernes las protestas en contra de la reforma propuesta por Andrés Manuel López Obrador.
Por tercer día, jueces, magistrados, oficiales, secretarios, actuarios y otros integrantes del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) mantuvieron un plantón afuera de las sedes del Poder Judicial en la Ciudad de México. Sin embargo, este viernes unieron fuerzas frente a San Lázaro, donde gritaron consignas y marcharon de forma pacífica.
"Tenemos que hacernos visibles, que nos tomen en cuenta. Ya presentamos un escrito en la Cámara de Diputados para solicitar audiencia, para que nos escuchen y queremos hacer valer nuestro derecho de abrir el diálogo. La agenda es esa, ser escuchados", dijo Patricia Aguayo, vocera del Movimiento de Trabajadores del Poder Judicial.
Desde las 10 de la mañana, grupos denominados Circuitos Unidos, que suman 32 y están constituidos por comités de las diferentes sedes como Revolución, Periférico, Insurgentes, entre otras, se concentraron frente al edificio de San Lázaro para iniciar la protesta.
Vestidos con ropa blanca y gorras o playeras con la consigna "El PJF trabaja para defender tus derechos. Hoy nos toca defendernos para defenderte", comunicaron que iban a continuar con la solicitud de su derecho de audiencia con servidores públicos de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) para expresar sus inquietudes respecto a la reforma judicial.
Aunque el jueves marcharon a la Cámara de Diputados para pedir por escrito dicha reunión, no se les concedió. Así, este viernes organizaron una nueva caminata pacífica con el objetivo de que fueran recibidos por los legisladores encargados de revisar la reforma.
"¿Eso es diálogo? ¿Eso es querer oírnos?", cuestionó Aguayo, quien aprovechó para denunciar que la entrada a los diálogos de la reforma judicial le fue negada, pese a que tramitó su acceso.
"¡Si el pueblo se informa, no pasa la reforma!", "¡Yo sí trabajo, no hago mañaneras!" y "¡Sin color, sin partido, la justicia se ha impartido!", fueron las consignas con las que los trabajadores avanzaron por la calle Eduardo Molina hacia la Cámara de Diputados.
En su recorrido, conductores y peatones apoyaron su causa con el claxon, chiflidos y aplausos. También algunas personas, así como ocurrió en el enfrentamiento de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), les gritaron ofensas como: "¡Pónganse a trabajar!".
En la vanguardia de la marcha, Patricia Aguayo pregonaba por qué la reforma podría perjudicar a más de 50 mil trabajadores del Poder Judicial de la Federación. "El objetivo es decirles: 'Estamos aquí. Recíbenos, por favor'. Eso es lo que queremos. Todos los compañeros están muy interesados en sumarse a estas actividades, porque es importante que se escuchen nuestras voces y opiniones sobre esta reforma", explicó la también secretaria del Décimo Tribunal Colegiado en Materia del Trabajo.