El reto, superar liderazgo de AMLO: Morena

Morena renovará su dirigencia tras cuatro años, en los que pasaron de gobernar siete a 24 estados

De cara a la renovación de su dirigencia a partir de septiembre próximo, politólogos y analistas advierten que Morena, al operar como un partido hegemónico, se convierta en un remedo del viejo PRI, un partido sin voz propia que sólo repita las consignas de su líder desde la Presidencia.

Consultados por el gran Diario, señalan que la gran fragilidad de Morena también reside en la carencia de liderazgos capaces de reemplazar a su creador, Andrés Manuel López Obrador, y se mantenga sólo como un instrumento electoral del gobierno.

Si bien no ven que la disputa por el poder entre facciones lleve a una desbandada en el partido, tendrá con el tiempo dificultades para abrir espacios para la crítica o la renovación, pues dependerá de lo que diga sólo una persona.

Morena renovará su dirigencia tras cuatro años, en los que pasaron de gobernar siete a 24 estados, y uno de sus mayores retos será avanzar sin la figura del presidente López Obrador, ante la ausencia de un liderazgo de esa magnitud.

El liderazgo de Mario Delgado al frente del partido concluye en octubre, por lo que la renovación deberá realizarse en septiembre.

El partido fundado por Obrador tendrá el reto de encontrar liderazgos tras la salida del Presidente, así como abrir espacios para la crítica o su renovación.

Mario Delgado estimó que el reemplazo de la presidencia tendría que ser en septiembre, aunque no se ha definido la fecha ni el mecanismo que utilizará el partido.

Además de su salida, Delgado fue nombrado como secretario de Educación del gabinete de Claudia Sheinbaum, por lo que debe finalizar la transición antes de esa fecha para asumir su nuevo encargo.

Los estatutos establecen dos opciones para la elección de la presidencia y secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN): la primera, que serán elegidos en una asamblea del Congreso Nacional.