A seis meses de la guerra entre los grupos "Los Chapitos" y "Los Mayitos" en Sinaloa, la violencia ha causado más de mil 200 desaparecidos y casi 930 asesinatos.
La crisis de inseguridad ha impactado gravemente al comercio y los servicios, con una caída del 40% en las ventas y el cierre de numerosos negocios, lo que pone en riesgo la estabilidad financiera de muchos emprendedores.
Los comerciantes enfrentan dificultades para cumplir con sus pagos y, aunque el gobierno estatal ha ofrecido apoyos y créditos, los empresarios señalan que estas ayudas solo fueron paliativos.
La situación ha afectado especialmente a los sectores inmobiliario, de hospedaje y eventos sociales, con un descenso en la demanda de casi el 60%.
Las pérdidas económicas en los primeros 100 días de violencia se calcularon en 18 mil millones de pesos, y la Asociación de Bancos de México alertó sobre la preocupación por la cartera de créditos en Sinaloa, que supera los 215 mil millones de pesos.
Aunque algunos negocios han recibido apoyos como créditos con tasa cero, la mayoría de los comercios sigue luchando por sobrevivir ante la falta de clientes y el cierre de establecimientos.
La caída en el consumo, la desconfianza de los ciudadanos y la inseguridad han provocado que muchos negocios ajusten sus horarios de operación, con una disminución de entre un 30% y un 70% en sus ventas.
La Cámara de Comercio ha advertido que algunos empresarios se ven obligados a recortar personal para evitar la quiebra.
A pesar de la ayuda estatal, como los apoyos económicos directos y créditos, muchos empresarios aseguran que las pérdidas son tan significativas que no se vislumbra una pronta recuperación.
Además, la violencia y las desapariciones siguen afectando a la población, con 1,273 casos reportados.
Aunque el gobierno estatal ha intentado calmar la situación, con el regreso de los estudiantes a clases presenciales y la ampliación de horarios en algunos negocios.