La tormenta geomagnética que impactó el territorio nacional el 10 de mayo, generando auroras boreales visibles en algunas zonas de México, llegó a su éxodo luego de 39 horas, informó el Servicio de Clima Espacial México (SCIESMEX) del Instituto de Geofísica (IGf) de la UNAM.
Según el comunicado emitido por la Máxima Casa de Estudios este domingo, la tormenta geomagnética se encuentra actualmente en fase de recuperación, con una disminución gradual de su intensidad. Los índices geomagnéticos regionales de México (kmex) indican valores no perturbados desde hace más de 9 horas, lo que indica que el evento concluyó.
No obstante, el SCIESMEX advirtió sobre la posibilidad de que otra tormenta solar impacte la Tierra en las próximas horas, lo que podría aumentar nuevamente la intensidad y extender la duración de las condiciones de tormenta geomagnética.
La región activa AR3664, responsable de las tormentas solares que provocaron la tormenta geomagnética del 10 de mayo, se está aproximando al limbo solar. Se espera que las tormentas solares que pueda producir ahora tengan menores efectos en la Tierra.
Las tormentas solares son fenómenos naturales que ocurren regularmente y su predicción es similar a la de los sismos. Sin embargo, mediante el monitoreo constante del Sol, el medio interplanetario, la ionósfera y el campo magnético terrestre, se pueden hacer recomendaciones para prevenir sus efectos.
En días previos a la tormenta geomagnética, una serie de fulguraciones clase X en dos regiones activas en la superficie del Sol causaron algunas fallas en las comunicaciones por radio de alta frecuencia en México. Además, se emitieron eyecciones de masa coronal que se propagaron hacia la Tierra, potencialmente afectando satélites, telecomunicaciones y sistemas de navegación.
El impacto de estas eyecciones solares se reflejó en el avistamiento de auroras boreales en diversas partes del mundo, incluyendo México, donde ciudades como Chihuahua, Zacatecas, Sonora y Baja California fueron testigos de este fenómeno, iluminando el cielo con tonalidades rojizas y violetas.