El presidente de la Mesa Directiva del Senado, Alejandro Armenta Mier, intentó deslindarse de los señalamientos por presuntos actos de corrupción y dispendio de su coordinador de asesores, José Luis García Parra.
García Parra, colaborador cercano del político poblano, fue exhibido por la presunta compra de un automóvil Audi R8 con valor superior a los tres millones de pesos, lo que equivale al triple de sus ingresos anuales como asesor legislativo.
"Cada quien es responsable de sus actos, yo no voy a meter las manos por nadie que cometa actos delictivos", dijo el senador por Morena.
En entrevista en el Patio del Federalismo del Senado, luego de entregar reconocimientos a decenas de fisiculturistas, Armenta Mier, acusó una campaña de ataques en su contra.
"Tengo tanta confianza en no estar vinculado en este tipo de cosas y que son producto de ataques que hacen por denunciar la corrupción el abuso del poder en Puebla que estoy dispuesto a debatirlo con quien así me señale porque es muy fácil descalificar, pero quien acusa está obligado a demostrarlo", apuntó.