Las organizaciones criminales La Familia Michoacana y Los Tlacos pactaron una tregua tras la masacre ocurrida esta semana en la comunidad Las Tunas, municipio de San Miguel Totolapan, en la región de la Tierra Caliente de Guerrero.
El director de Centro de Defensa de los Derechos de las Víctimas de la Violencia Minerva Bello, el sacerdote José Filiberto Velázquez Florencio, informó que los hermanos Johnny y Alfredo Hurtado Olascoaga, líderes de La Familia Michoacana, hablaron por teléfono con el líder de Los Tlacos, Onésimo Marquina Chapa, y acordaron un cese al fuego.
El cura explicó que la tregua será en todos los territorios donde los dos grupos mantienen disputa. Agregó que desconoce en qué consistió la tregua, "sólo que habrá cese al fuego". Precisó que ni él ni los obispos de Guerrero participaron.
El pasado 14 de febrero, el obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, reveló que a inicios de año dialogaron con los líderes de ambos grupos en busca de una tregua, pero estos se negaron.
La negativa, según dijo el obispo, fue porque no quisieron ceder la comunidad de Las Tunas.
De acuerdo con autoridades, La Familia Michoacana y Los Tlacos se disputan la parte de la sierra que abarca los municipios de Heliodoro Castillo (Tlacotepec) y San Miguel Totolapan.
En lo que va del año se han registrado dos masacres en esa zona. La primera, en la comunidad de Buenavista de Hurtado, en Tlacotepec. Según pobladores, integrantes de La Familia Michoacana atacaron a la comunidad con drones, lo que dejó un saldo de 10 muertos.
La segunda fue el lunes pasado, en Las Tunas, en San Miguel Totolapan. En un enfrentamiento murieron 16 de La Familia Michoacana y uno de Los Tlacos.
EXFUNCIONARIO CON LÍDER CRIMINAL
El exdelegado de la Comisión Técnica de Transportes y Vialidad en la región Centro de Guerrero, José Erasto Figueroa Durán, fue exhibido en una fotografía con quien podría ser Celso Ortega Jiménez, presunto líder de la organización criminal de Los Ardillos.
Figueroa Durán fue cesado el 9 de febrero, cuando Chipancingo estaba paralizada tras el asesinato de siete choferes de taxis y urvan, como parte de la disputa entre las organizaciones criminales de Los Ardillos y Los Tlacos.
Fuentes del gobierno estatal confirmaron que es Figueroa Durán el hombre que aparece abrazando al líder criminal; sin embargo, se negaron a responder si la destitución se debió a dicho encuentro.