De forma irónica y a ocho meses de que finalice su sexenio, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró este martes que "la dictadura" terminará en ocho meses.
En conferencia de prensa matutina, el mandatario federal manifestó que ante lo señalado por la oposición de que "se está destruyendo al país", el próximo 2 de junio, cuando se lleve a cabo la elección presidencial, se tendrá la posibilidad de evitar que siga esto.
"Nosotros vamos muy bien y debemos de celebrarlo, pero si hay esas diferencias políticas también somos libres, pero no es para tanto. De que yo soy un dictador, bueno ya se va a acabar la dictadura porque ya en ocho meses me voy".
"Que 'se está destruyendo el país´, ya en cuatro meses (fecha de la elección presidencial ) vamos a saber, hay la posibilidad de que ya no se siga destruyendo el país, en cuatro meses porque para eso es la democracia. El pueblo es el que manda, es el que decide", aseguró.
En Palacio Nacional, el jefe del Ejecutivo federal consideró que lo económico es difícil que haya gente que le esté yendo mal porque hay empleo, los ingresos están bien y la gente está contenta.
"Hasta los de mero arriba están obteniendo utilidades. Está muy bien la economía del país entonces no es un asunto económico".
"El problema es político, diría ideológico, porque así es el pensamiento conservador, es muy autoritario, facho, entonces andan muy molestos (...) No desearle mal a nadie porque estos ultraconservadores, fachos, ultra autoritarios son muy apasionados, muy apasionados, están molestos con la transformación, es normal".
El presidente López Obrador recomendó en no caer en ninguna provocación y "ser muy respetuosos, tolerantes, ni enfrascarse en discusiones, es ´yo pienso esto´, está muy bien, eres libre, sigue tu camino".
Además, exhortó que ante cualquier diferencia se cuente hasta 10 aunque se tenga "el corazón caliente, la cabeza fría porque no se tiene enemigos a destruir, sino adversarios".