Samsung está en el centro de una polémica relacionada con la reparación de sus dispositivos. Tras conocerse que rompería su asociación con iFixit, un documento filtrado expone las prácticas cuestionables de la surcoreana frente al derecho a reparar. Samsung exigirá a especialistas que compartan toda la información personal de quienes envían a reparar sus móviles, de lo contrario, no proveerá las piezas originales.
Un reporte de 404 Media muestra partes del nuevo contrato que Samsung ofrece a los reparadores independientes. El gigante tecnológico está condicionando la entrega de refacciones originales a cambio de los datos de todas las personas que envían a reparar su dispositivo. Los técnicos tienen que enviar un formulario que incluya información detallada del móvil, acompañada de nombre, dirección, teléfono, código postal y motivo de la falla.
Tal vez lo más absurdo es que Samsung exige a los talleres que comuniquen cuando un dispositivo no incluya piezas originales. Bajo los términos de este contrato, si el especialista técnico encuentra una batería de AliExpress u otra pieza de terceros cuando desarma tu Galaxy, estará obligado a desmontarla y comunicar inmediatamente a Samsung.
Otras cláusulas del contrato limitan el tipo de piezas de refacción que se ofrecen y prohíben las reparaciones que involucren soldaduras o manejo de la placa base. Sumado a eso, los talleres independientes tendrán que pagar por obtener una certificación adicional de Wise, una asociación que valida las habilidades de reparación a cambio de una cuota anual que supera los 200 dólares.
De acuerdo con 404, el contrato es auténtico. Algunos expertos afirman que Samsung está imponiendo reglas más estrictas para dificultar el acceso a las piezas originales. No obstante, en algunos países que aprueban el derecho a reparar, la firma de estos contratos no está permitida.
Samsung, está en contra del derecho a reparar
No es un secreto que empresas tecnológicas como Samsung o Apple dificulten las reparaciones. Dispositivos como el iPhone 15 o el Galaxy S23 Ultra cuentan con calificaciones muy bajas en la escala de reparabilidad. El móvil de Samsung complica el acceso al interior a través del pegamento y múltiples capas de piezas desmontables, lo que vuelve tedioso el proceso.
Tras las críticas y la entrada en vigor del derecho a reparar en Estados Unidos, Samsung firmó un acuerdo con iFixit para ofrecer piezas originales y guías oficiales. La asociación permitiría que cualquier usuario comprara piezas del Galaxy S20 o S21 para repararlo desde su casa. Samsung afirmó que la alternativa de autoreparación "ayudaría a los clientes a prolongar la vida de sus dispositivos, antes de reciclarlos".
Al final del día, la alianza no funcionó, ya que Samsung nunca se comprometió con la estrategia. "Samsung no parece interesado en habilitar la reparación", dijo Kyle Wiens, director ejecutivo de iFixit en una entrevista con The Verge. Wiens criticó a la compañía por hacer mucho ruido y no cumplir con su palabra.
"Los comunicados de prensa llamativos y las iniciativas ambiciosas no significan mucho sin un seguimiento. Ya hemos pasado por esto con Samsung antes con Galaxy Upcycling, la increíble idea de reutilización de dispositivos que les ayudamos a anunciar. Luego nos engañaron y nunca lo soltaron."
El jefe de iFixit fue más allá y señaló que Samsung solo quiere lucrar con el trabajo no remunerado. La surcoreana no cumplió con su parte del trato y mantuvo la tendencia de lanzar dispositivos Galaxy cada vez menos reparables. "Intentamos que esto funcionara. Dios, lo intentamos. Pero con prioridades tan divergentes ya no podemos seguir adelante", añadió.