Después de revisar los términos del acuerdo, la entidad ha dictaminado que esta compra puede dañar la competencia en el sector del diseño digital en el país, además de reducir la innovación y ser un mero instrumento para que Figma deje de ser una amenaza para dos de los productos estrella de Adobe: Photoshop e Illustrator.
El regulador británico se une así al de la Unión Europea, que hace solo unos días que anunció su oposición al acuerdo tal como está en este punto, y ha pedido a ambas partes que tomen medidas para poder solucionarlo. Ambas compañías van a presentar alegaciones al respecto.
Por ahora, la conclusión de la reguladora británica es provisional, y sirve para abrir la puerta a una investigación en profundidad de la operación. La entidad señala que su conclusión en este momento es que «la fusión eliminaría la competencia entre competidores cercanos, e impondría un freno importante a la competitividad de Figma, en un mercado en el que Figma es ya el actor más sólido de lejos«.
Durante esta nueva investigación, el regulador británico revisará más a fondo las implicaciones de la posible compra, y en caso de que siga manteniendo que la compra daña a la competencia, podría dictar medidas que ambas empresas tendrían que tomar para darle luz verde. Pero si considera que no es suficiente con las medidas, bloqueará la operación directamente.
Adobe anunció el año pasado su intención de comprar Figma, creadora de una plataforma que permite a sus usuarios colaborar en el diseño y prototipado de apps y webs, por 20.000 millones de dólares. Desde el principio, el acuerdo levantó suspicacias en las entidades reguladoras de varios países y regiones, que abrieron investigaciones preliminares sobre él. Además de Reino Unido, el acuerdo se está analizando tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea.
Como es lógico, en Adobe no están muy conformes con una decisión que les hace retrasar todavía más el cierre de la operación, ya que la decisión final de las autoridades reguladoras británicas no se conocerá hasta el 25 de febrero del año que viene. Por ahora, tanto Adobe como Figma pueden presentar alegaciones hasta el 19 de diciembre próximo.