Microsoft ha iniciado otra ronda de despidos, que se unen a los 10.000 que ha despedido desde el pasado mes de enero, según GeekWire. La compañía ha ejecutado los despidos solo una semana después de haber empezado su año fiscal 2024. Su año fiscal 2023 terminó el pasado 30 de junio.
Los de Redmond han comunicado a las autoridades que recortarán 276 puestos de trabajo en el estado de Washington (EEUU). De estos puestos, 66 son puestos remotos y 210 en sus oficinas de Redmond y Bellevue. Al parecer, los despidos han afectado a las áreas de ventas, atención al cliente y soporte técnico. Se desconoce si ha habido más despidos que afecten a otros empleados de la compañía en EEUU o en otros países en los que tiene presencia.
Hasta ahora han aparecido ya varias publicaciones de empleados afectados en LinkedIn, pertenecientes a distintos equipos y con base en diversos países, por lo que los despidos de Washington son solo una parte de os totales que se han llevado a cabo en esta nueva ronda.
Según ha comentado al respecto la empresa, «los ajustes organizativos y los ajustes de plantilla son una parte habitual y necesaria de la gestión del negocio. Seguiremos dando prioridad e invirtiendo en áreas de crecimiento estratégico para nuestro futuro, así como en dar apoyo a nuestros partners y clientes«.
No es la primera vez que Microsoft aprovecha un inicio de año fiscal para hacer ajustes de plantilla en distintas áreas y departamentos. El año pasado, sin ir más lejos, la compañía notificó también una pequeña ronda de recortes por estas fechas.
Microsoft es solo una de las grandes compañías tecnológicas que ha acometido ajustes de plantilla en los últimos meses, después de haber contratado en exceso durante los meses que ha durado la pandemia. Esto, unido a la situación macroeconómica y a lo descensos en ventas en el sector de la tecnología después de un periodo de ventas crecientes y elevadas en TI, han llevado a las empresas a tener que hacer recortes de presupuestos y de plantilla.
Además, esta situación no es exclusiva de las grandes tecnológicas. También ha afectado a empresas de otros sectores, lo que a su vez ha repercutido en las tecnológicas. Según han comentado en Microsoft en los últimos meses, sus clientes están buscando maneras para ahorrar en sus facturas de computación en la nube, por ejemplo.