El primero es que las ventas globales de semiconductores alcanzaron un nuevo récord en 2021, generando un montante total de 555.900 millones de dólares, una cifra que representa un crecimiento del 26,2% (anual). El segundo dato es una previsión de crecimiento para 2022 que, en teoría, será del 8,8%.
Los buenos resultados dentro del mundo de los semiconductores no son una sorpresa, al fin y al cabo 2021 estuvo marcado por una enorme demanda de chips y por un marcada escasez de estos. Durante todo ese año, los principales jugadores del sector intentaron mejorar la producción y aceleraron la implantación de nuevas herramientas para poder cubrir las necesidades de sus clientes, una realidad que no va a cambiar en 2022, ya que la demanda sigue creciendo, y para satisfacerla hace falta una mayor capacidad de producción.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que no es posible aumentar la capacidad de producción de semiconductores de la noche a la mañana. Es un proceso muy complejo que puede tardar desde varios meses hasta un año en empezar a dar sus frutos, así que es probable que buena parte de las medidas de refuerzo que se adoptaron en 2021 para mejorar la producción no empiecen a dar frutos hasta el primer o el segundo trimestre de este año.
John Neuffer, CEO de la Semiconductor Industry Association, comentó que en 2022 se producirá un crecimiento más lento, pero en cualquier caso los datos que se manejan son muy positivos para el sector. También confirmó que 2021 fue el primer año, desde 2018, en el que el sector logró superar la cifra de 1 billón de chips vendidos, o lo que es lo mismo, un trillón americano.
Por otro lado, el ejecutivo también ha explicado que, aunque gigantes como TSMC, Samsung e Intel han anunciado inversiones por valor de decenas de miles de millones de dólares en nuevas fábricas, al final la digitalización seguirá elevando la demanda a niveles nunca vistos anteriormente. Esto hará que, en su opinión, se aceleren y potencien los planes de construcción de nuevas fábricas. Qué podemos decir, no hay duda de que el silicio es «el oro del siglo XXI».
En total, durante 2021 se vendieron la friolera de 1,15 billones de semiconductores. Los chips para el mundo del automóvil fueron los que experimentaron el mayor crecimiento, junto a otros semiconductores que están preparados para superar cambios marcados de calor y otros desafíos ambientales y físicos. Las ventas en ese sector subieron un 34% frente al año anterior. China repitió como el mercado más grande dentro del mundo de los semiconductores, con unas ventas totales por valor de 192.500 millones de dólares en 2021, cifra que, según la SIA, representa un crecimiento del 27,1% frente al año anterior.