Ya ha pasado algo más de un mes desde que Sony anunciara, finalmente, la esperada PS5 Slim, un refresh que pese a no llevar el apellido que acredita su menor tamaño frente al modelo original, sí que es algo más pequeña. Como ya adelantó Sony en aquel momento, estos nuevos modelos empezarían a venderse en noviembre en Estados Unidos, e irán llegando a más mercados a medida que se de salida al stock de los modelos originales que todavía están disponible en dichos mercados.
Un anuncio que llamó mucho la atención fue la salida a la venta de una unidad óptica externa que podremos emplear con PS5 Slim Digital Edition. Es cierto que comprar, por separado, la consola y la unidad óptica, es más caro que comprar la PS5 que ya la incluye por defecto (569,98 euros frente a 549,99 euros, 19,99 euros más). No es una gran diferencia, pero sí la suficiente como para que su adquisición por separado solo tenga sentido en determinados casos.
Uno de ellos es, sin duda, el poder compartir la unidad óptica entre varias personas-consolas. Ya sea que mi amigo Paco y yo la compremos a medias y la compartamos, o que yo me compre una PS5 Slim DE para el salón y otra para el dormitorio, puede tener sentido en determinadas circunstancias. Sin embargo, las dudas al respecto empezaron a emerger con la llegada de las primeras unidades a los compradores, y el descubrimiento de que es necesario activar el lector al utilizarlo con la consola por primera vez. Esto, claro, ha generado muchas dudas, sospechas y algún que otro temor.
Una de las dudas era, claro, si una misma unidad se puede emplear en dos o más consolas, y a este respecto tenemos buenas noticias, pues las pruebas llevadas a cabo por TronicsFix nos muestran que se puede registrar y utilizar una misma unidad óptica en varias PS5 Slim Digital Edition sin problemas. Tan solo debemos registrar la unidad en cada una de ellas la primera vez que la conectamos y, de este modo, ya podremos utilizarla sin limitaciones. Y, lo que es más importante, el registro de la misma en una consola no elimina el registro en la anterior.
La única condición es, claro, que la PS5 Slim DE esté conectada a Internet en el momento de registrar la unidad, pues para completar este proceso se debe establecer una conexión con los servidores de Sony, que validarán la operación. Esto, claro, nos recuerda un temor que ya mencionamos al mostrar las primeras imágenes, y es que si algún día Sony decide que ha finalizado el ciclo de vida del lector, podría desactivar la función de registro. Esto, en principio, no supondría un problema para los usuarios que ya la tengan registrada en su consola, pero el problema es que, si se restablece la consola a configuración de fábrica, es necesario volver a registrar la unidad.
Quiero pensar que Sony actuará con responsabilidad en este punto, asegurando la persistencia de los servicios de validación de la unidad óptica de PlayStation 5 Slim DE durante bastantes años, pues de lo contrario nos podríamos encontrar frente a un ejemplo flagrante de obsolescencia programada. Pero, repito, confío en que Sony actuará adecuadamente en este sentido.