Google, finalmente, ha comenzado a bloquear las cookies de terceros. A partir de hoy, la compañía ha activado la primera fase: unos 30 millones de personas que usan Google Chrome han comenzado a tener deshabilitada esta característica. Se trata de una muestra del 1 % de todo su caudal de usuarios y es un paso clave para la implementación definitiva a finales del año.
La empresa ha explicado que a estos primeros usuarios, elegidos al azar en todo el mundo, les aparecerá una notificación. Si formas parte de la muestra, cuando abras Google Chrome en tu computadora de escritorio o en Android, el navegador te preguntarás si quieres «navegar con más privacidad». Tendrás la opción de aceptarla o rechazarla.
Y listo. Mientras navegas por la web, las cookies de terceros estarán restringidas de forma predeterminada, lo que limitará la capacidad de distintos sitios web de rastrear tu actividad en diferentes sitios web.
Las cookies son pequeños archivos almacenados en tu dispositivo. Estos se pueden utilizar para registrar varios de tus datos: qué haces en un sitio, qué equipo estás usando, desde dónde te conectas, cómo llegaste a determinada página. Son fundamentales, sobre todo, para el negocio publicitario en internet. De esta forma, logran personalizar los anuncios en función de tus «intereses». También te ayudan a iniciar sesión más rápido en algunos portales.
Si durante la prueba, Google Chrome detecta que tienes problemas para visualizar un sitio que no funciona sin cookies de terceros, te mostrará la opción para volver a habilitarlas temporalmente. La verás en el ícono del ojo, en el lado derecho de la barra de direcciones.
El comienzo de la muerte de las cookies de terceros en Google Chrome
Ya otros navegadores, como Safari de Apple y Mozilla Firefox, incluyen opciones para bloquear cookies de terceros. Pero el impacto de que lo haga Google Chrome es incomparable: es, por mucho, el navegador más usado en el mundo. Seis de cada 10 usuarios de internet lo utilizan, de acuerdo con el análisis de StatCounter.
Es «un hito clave en nuestra iniciativa Privacy Sandbox para eliminar gradualmente las cookies de terceros para todos en la segunda mitad de 2024», explicó el año pasado Antonio Chávez, vicepresidente de pruebas sobre privacidad de Google. «Hemos creado nuevas herramientas para sitios que admiten casos de uso clave y brindamos tiempo a los desarrolladores para realizar la transición», publicó Chávez en el blog de la compañía en diciembre.
Google no pretende acabar con el negocio publicitario. No le conviene: es la empresa que más ingresos reporta gracias a la publicidad. La tecnológica ha explicado que usará nuevas herramientas que permiten un equilibrio entre la protección de la privacidad de los usuarios y seguir brindando datos a sus anunciantes para personalizar anuncios.
Google Chrome no dejará de rastrearte. Solo evitará que otras empresas accedan directamente a la información sobre tu actividad en Internet. En líneas generales, la empresa concentrará todos lo que sepa sobre tu navegación, lo analizará y clasificará. Luego, brindará a los interesados en pautar una especie de perfil de usuario general, para que los anunciantes puedan dirigir su publicidad a audiencias específicas.
A la espera de la posición de reguladores
La implementación definitiva de la eliminación de cookies de terceros dependerá de si los reguladores no ven allí una acción que perjudique a otras empresas. Google está bajo la lupa por implementar estrategias para sofocar a la competencia.
El año pasado se inició un juicio histórico en el que el Departamento de Justicia de Estados Unidos acusó a la compañía de utilizar tácticas desleales para mantener su dominio en el mercado de las búsquedas en Internet. El veredicto se conocerá en los próximos meses.
Sobre la eliminación de las cookies en Google Chrome, está pendiente un pronunciamiento del organismo de control de la competencia del Reino Unido. La Autoridad de Mercados y Competencia en este país ha levantado una alerta porque cree que esto podría darle a los de Mountain View un poder excesivo sobre el mercado publicitario en línea.
«La solución de Google, Chrome Privacy Sandbox, que solo funciona en un navegador Chrome, probablemente no beneficie a nadie más que a Google», dijo Phil Duffield, vicepresidente británico de The Trade Desk, que opera una plataforma para que las empresas compren anuncios en línea. «Proteger la privacidad del consumidor en línea no tiene por qué significar dificultar que los editores obtengan ingresos», declaró Duffield a la BBC. «La industria de la publicidad tiene la misión colectiva de construir algo mejor».