Es una herida que sigue sangrando en Microsoft. Su actual director ejecutivo, Satya Nadella, reconoció que renunciar a Windows Phone y a los dispositivos móviles fue un gran error para la compañía. «Creo que pudo haber alguna manera de hacerlo funcionar», dijo Nadella en entrevista con Business Insider.
¿Existe algún tipo de error estratégico real o simplemente una decisión equivocada de la que se arrepienta en retrospectiva?, le preguntaron a Nadella, CEO de la tecnológica desde 2014. A los pocos meses de asumir el cargo, el directivo decidió cancelar el acuerdo multimillonario relacionado con el negocio de los teléfonos Nokia. En su momento, explicó que era parte de una estrategia para hacer crecer un negocio telefónico independiente.
«Creo que la decisión de la que habla mucha gente, y una de las decisiones más difíciles que tomé cuando me convertí en CEO, fue nuestra salida de lo que llamaré el teléfono móvil, tal como se definió entonces», respondió el ahora líder de Microsoft. En retrospectiva, dijo, tal vez hubiera funcionado «reinventando la categoría de informática entre PC, tabletas y teléfonos».
Microsoft confirmó a mediados de 2017 que Windows Phone estaba muerto. Y Nadella contó ese mismo año que siempre estuvo en contra del negocio con Nokia. Votó en contra cuando su antecesor, Steve Ballmer, propuso comprar Nokia en 2012 para apuntalar la división de telefonía móvil de la empresa. «Era demasiado tarde para recuperar el terreno que habíamos perdido. Estábamos persiguiendo las luces traseras de nuestros competidores», contó en su libro «Hit Refresh».
El lamento de los CEO por la falla de Microsoft con Windows Phone
Nadella es ya el tercer director ejecutivo de Microsoft que admite los errores sobre sus desarrollos móviles. Su cofundador y ex CEO, Bill Gates, también lo reconoció como su falta más grande. «El mayor error que he cometido es cualquier mala gestión que haya cometido y que haya provocado que Microsoft no sea lo que es Android. Es decir, Android es la plataforma telefónica estándar que no pertenece a Apple», dijo en 2019. «Era natural que Microsoft ganara».
Google compró Android en 2005. Eric Schmidt, ex director ejecutivo del gigante de las búsquedas, reconoció en 2012 que la estrategia inicial de Google era superar los primeros esfuerzos de Microsoft con su Windows Mobile.
Y Ballmer, quien lo intentó con Nokia, simplemente no lo supo ver a tiempo. Una anécdota lo resume: llegó a reírse del iPhone en una entrevista por no tener teclado. Lo llamó «el teléfono más caro del mundo» e incapaz de atraer a clientes empresariales.
«Lamento que hubo un período a principios de la década de 2000 en el que estábamos tan concentrados en lo que teníamos que hacer con Windows que no pudimos redistribuir el talento al nuevo dispositivo llamado Phone», explicó Ballmer en 2013. «Eso es lo que más lamento».