SpaceX finalizó la racha de lanzamientos exitosos de su cohete Falcon 9. La misión más reciente, que pretendía colocar satélites de Starlink en órbita, sufrió un fallo catastrófico. La segunda etapa se desintegró de forma sorpresiva sin cumplir su objetivo.
Al igual que ocurre con todas las misiones, SpaceX llevó a cabo una transmisión en vivo del lanzamiento en X. Tras la separación de la segunda etapa, la cámara captó una inusual acumulación de hielo en los costados. Aunque la etapa sobrevoló por seis minutos, el fallo le impidió completar el segundo encendido para cambiar la órbita de elíptica a circular.
"Durante el lanzamiento de Starlink del Falcon 9 de esta noche, el motor de la segunda etapa no completó su segundo encendido. Como resultado, los satélites Starlink se desplegaron en una órbita más baja de lo previsto", mencionó SpaceX en su cuenta de X. "SpaceX ha hecho contacto con cinco de los satélites hasta ahora y está intentando elevar su órbita utilizando sus propulsores de iones."
De acuerdo con Elon Musk, la segunda etapa del Falcon 9 sufrió un desmontaje rápido no programado (RUD, por sus siglas en inglés). "El reinicio de la etapa superior para elevar el perigeo resultó en un RUD del motor por razones actualmente desconocidas", reveló el jefe de SpaceX. Musk añadió que el equipo estudiaría los datos para comprender la causa del fallo.
Los problemas en el Falcon 9 concluyen una racha de ocho años de lanzamientos exitosos. La última vez que vimos un percance fue en enero de 2016, cuando el cohete estalló tras no conseguir aterrizar correctamente en la plataforma. Una investigación encontró que la explosión se debió a una acumulación de oxígeno entre el depósito COPV y una hebilla de revestimiento, generando una combustión de la envoltura.
Qué pasará con las próximas misiones del Falcon 9 de SpaceX
Aunque SpaceX consiguió aterrizar de forma exitosa el Falcon 9 en su misión más reciente, los problemas en la segunda etapa se analizarán a fondo. Elon Musk mencionó que lograron desplegar los satélites, pero el perigeo puede estar demasiado bajo para elevar su órbita.
"Estamos actualizando el software del satélite para que los propulsores de iones funcionen en su equivalente a warp 9", dijo Musk en una publicación posterior. "Los propulsores de los satélites necesitan elevar su órbita más rápido de lo que la resistencia atmosférica los empuja hacia abajo o se quemarán."
Hace unos minutos, SpaceX confirmó que hicieron contacto con 10 satélites e intentaron elevar su órbita, sin embargo, se encuentran en un entorno de enorme resistencia y no son rescatables.
"Cada paso por el perigeo elimina más de 5 km de altitud desde el punto más alto de la órbita del satélite. Con este nivel de resistencia, es poco probable que nuestro empuje máximo disponible sea suficiente para elevar con éxito los satélites.
Como tal, los satélites volverán a entrar en la atmósfera de la Tierra y desaparecerán por completo. No suponen una amenaza para otros satélites en órbita ni para la seguridad pública.
SpaceX
Con el aterrizaje de la primera etapa del Falcon 9, SpaceX mencionó que completaron su misión número 70 en lo que va de 2024. La empresa tiene programados otros lanzamientos de satélites de Starlink para julio, así como la primera misión de Polaris, el programa que busca llevar la exploración espacial al siguiente nivel.
El objetivo del primer lanzamiento de Polaris será volar más alto que las misiones Dragon, probar los nuevos trajes espaciales fuera de la nave y orbitar a través de partes del cinturón de radiación de Van Allen. El Falcon 9 enviará la Crew Dragon 2 con cuatro astronautas a bordo. Aunque Polaris es la próxima en el calendario, se desconoce la fecha exacta en que partirá del Centro Espacial Kennedy.