Forbes señala que las aplicaciones han bloqueado una operación que usaba una red de cuentas para suscitar perspectivas prooccidentales entre usuarios de Asia y Oriente Medio.
Según el informe de Graphika y la Universidad de Stanford, la campaña digital desmantelada fomentaba narrativas sobre políticas internacionales alienadas con la visión de Occidente (como la defensa de Ucrania y las críticas a países de Asia y Oriente Medio).
Las cuentas compartían los mensajes de medios de comunicación financiados por el gobierno de Estados Unidos (Radio Free Europe y Voice of America), además, acusaban al Kremlin de matar a civiles inocentes y las noticias tenían enlaces dirigidos a sitios web patrocinados por el ejército de EEUU.
Meta señaló un "comportamiento no auténtico coordinado" de las cuentas, mientras que Twitter las censuró por incumplir las políticas de manipulación y spam.
Las cuentas estaban dirigidas a usuarios de Asia Central y Oriente Medio, además, se dividieron en dos bloques:
-Una campaña abierta de mensajes del gobierno de Biden llamada 'Trans-Regional Web Initiativ'.
-Una serie de campañas repartidas por Instagram y por Facebook.
Los investigadores no han podido determinar el origen de las campañas, aunque ambas empresas apuntan a Reino Unido y Estados Unidos. También señalan que "los datos también las limitaciones del uso de tácticas no auténticas para generar participación y generar influencia en línea".
"Creemos que esta actividad representa el caso más extenso de operaciones encubiertas de influencia prooccidental en las redes sociales que ha sido revisado y analizado por investigadores de código abierto hasta la fecha", añaden.