Un año que fue complicado en su etapa final, pero que, como vemos, tuvo a AMD como uno de los grandes ganadores en dicho mercado, ya que su cuota total experimentó un crecimiento muy importante.
Si miramos la imagen adjunta, que representa la cuota de mercado por cantidad de ingresos en el sector de CPUs para servidores,veremos que Intel pasó de un 80,71% que tenía en 2021 a un 70,77% en 2022. Esto nos deja una caída de casi un 10% a nivel de ingresos, una cifra que sin duda es muy negativa, y que ha estado motivada por el empuje de AMD, aunque también tenemos sorpresas si miramos los resultados de AWS (Amazon Web Services) y de Ampere.
Empezamos con AMD, y vemos que los de Sunnyvale pasaron de un 11,74% a un 19,84%, una cifra que confirma el buen trabajo que está haciendo la compañía con sus procesadores EPYC, una generación que recientemente ha dado el salto a la arquitectura Zen 4, y que ha conseguido una enorme mejora tanto en densidad de núcleos como en rendimiento monohilo, y lo mejor es que no ha tenido que renunciar a una notable eficiencia para lograrlo.
Sin embargo, AMD no fue la única que creció. En esa misma gráfica podemos ver que los procesadores de AWS pasaron de una cuota del 1,82% a un 3,16%, un aumento discreto pero considerable, y los de Ampere pasaron de tener una presencia prácticamente nula a subir hasta un 1,52%. Teniendo en cuenta lo complicado que es este sector, y lo exigente y competitivo que resulta, no podemos hacer otra cosa que reconocer el mérito de ambas compañías en su intento de «apretar» a los dos gigantes del sector, Intel y AMD.
Intel sigue liderando cómodamente el mercado de CPUs para servidores, y viendo la diferencia que existe entre esta y AMD a nivel de ingresos en dicho mercado está claro que la situación no va a cambiar ni a corto ni a medio plazo, pero si la tendencia se mantiene puede que acabemos viendo un giro monumental a favor de la segunda. Recordad que, hasta hace cosa de cinco años, la presencia de AMD en este mercado era muy baja, y ahora roza el 20%.