Tláloc, Dios de la Lluvia, llegó a Nuevo León para quedarse y se estableció ayer en Palacio de Gobierno.
Para atraer más lluvias a la entidad, golpeada por la sequía en años anteriores; Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, obsequió al gobernador Samuel García Sepúlveda una figura en piedra del Rey de los Fenómenos Atmosféricos.
Su arribo coincide con las intensas lluvias registradas en las últimas horas, y el pronóstico de precipitaciones para el resto de la semana.
"Mi compadre Francisco Cervantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) me mando a palacio un TLÁLOC (dios de la lluvia)", compartió el mandatario en redes sociales el pasado jueves.
"Mañana lo instalamos a ver si es cierto! Gracias Paco y que se deje venir el agua".
El emecista optó por colocar la réplica de la deidad mexica en los bajos del Palacio de Cantera.
Quienes acuden al lugar, pueden observarla a su entrada desde la puerta a la Explanada de los Héroes, a un costado de las escaleras del lado derecho.
La pieza prehispánica mide alrededor de 1.60 metros, y simboliza la esperanza de mejores condiciones del tiempo.
Recientemente, Nuevo León registró una ola de calor que se prolongó por casi tres semanas y sumó más de 30 fallecimientos por las temperaturas extremas y sensación térmica de hasta 47 grados centígrados.
Sin embargo, a partir de este domingo regresaron las lluvias de fuertes a muy fuertes.
Se prevé que durante el mes de julio llueva por encima del promedio.
Tláloc es conocido por su facultad para dominar el agua y proveer el también llamado licor de la tierra que contribuye al crecimiento de los cultivos de maíz.
Para los aztecas, su poder era digno de grandes honores y sacrificios tanto de animales como de seres humanos pues la comunidad dependía del buen desempeño de estos para la prosperidad de su agricultura.(CLG)