La recolección de “pánico” ante las reducciones programadas de agua, disparó el consumo del vital líquido a más de 16 mil litros por segundo, 2 mil litros por segundo más que el promedio diario de la semana anterior.
En conferencia de prensa Nuevo León Informa, Juan Ignacio Barragán, director de Agua y Drenaje de Monterrey, señaló que hasta el domingo pasado se consumían alrededor de 14 mil litros por segundo al día; cifra que se disparó a niveles nunca antes vistos.
Según el monitoreo de la paraestatal, durante el lunes se consumieron 16 mil 436 litros por segundo, y el martes, día que arrancó el programa de reducción de presión al máximo, 16 mil 116.
Con ello, el semáforo de consumo se elevó a rojo.
"Son cifras inauditas, cifras que nunca se habían dado en Agua y Drenaje de Monterrey, que se explica fundamentalmente por el tema de pánico entre la población”, expuso.
“Ya sabemos que hubo compras de pánico, tambos, tinacos y tinas y la gente se puso acumular agua, no acumulemos agua para dos semanas, pueden acumular agua para un día, no para el próximo mes, con un día es suficiente".
“De pronto el lunes y martes fueron de locura, el lunes un día previo al nuevo programa el consumo nos subió a 16 mil 436 litros por segundo y el martes como quiera llegamos a 16 mil 116; si Guadalupe hubiera estado abierto hubiéramos rebasado los 17 mil litros por segundo, quizás hasta los 18 mil”, puntualizó.
Si bien la meta es ahorrar hasta 2 mil litros por segundo, en el primer día no fue así, pero consideró que pudo haber sido peor.
Para garantizar su cobertura total, se requiere bajar el consumo del área metropolitana a 12 mil litros por segundo.
Lo anterior ante la inminente pérdida de dos de sus fuentes de abastecimiento.
Es de destacar que al bajar su extracción, la Presa de La Boca cuenta aún con cuatro días de vida.
Por su parte, a la Presa Cerro Prieto le quedan 14.
Van contra tomas clandestinas
en empresas, domicilios y edificios.
Para impedir el robo de agua, Agua y Drenaje de Monterrey pondrá en marcha un programa de combate de alternaciones o tomas irregulares.
Juan Ignacio Barragán, director de AyD, indicó que se detectaron irregularidades en 3 mil industrias y comercios, 220 mil domicilios y 50 edificios multifamiliares o comerciales que están conectados a la red.
De manera adicional se buscará que en un lapso de tres o cuatro años se cambien por lo menos un millón de medidores obsoletos, con costo a la paraestatal.
“El objetivo final es de que el agua no contabilizada, que en total al inicio de la Administración era del orden de 60 por ciento del total del agua producida podamos subirla por lo menos al 75 por ciento mediante la lucha contra el robo del agua”, expuso.
“Tenemos 18 colonias conectadas de manera directa que nos da aproximadamente 18 mil viviendas, estas son colonias en diferentes zonas de la ciudad”.
“Adicionalmente estimamos alrededor de 200 mil viviendas de personas que están conectadas directo, en su mayoría son colonias populares pero también hay algunas colonias de nivel medio”, puntualizó.
Se prevé que personal de AyD acuda casa por casa para verificar, porque incluso hay gente que tiene conexiones por debajo de las banquetas.
A ello se suman alrededor de 50 edificios multifamiliares o comerciales que están conectados al agua sin contar con factibilidad actualizada de agua, así como 3 mil comercios e industrias con alteraciones en el medidor o conexiones clandestinas.
Barragán Villarreal señaló que se tienen un millón 800 mil metros cúbicos anuales de agua no contabilizada, pero que son usuarios que aunque están conectados de manera formal al sistema, cuentan con medidores obsoletos del año 2000 al 2005.
El funcionario explicó que la vida útil de un medidor es de alrededor de 5 a 6 años, por lo que a partir del quinto año su efectividad comienza a disminuir.