La Fundidora de Monterrey ha sido un ícono para la ciudad desde su creación, pues trajo a la ciudad bonanza, crecimiento y oportunidades de desarrollo para todos aquellos que ahí laboraron, sin embargo, la tragedia y posteriormente, el cierre de la empresa marcaron profundamente a nuestra sociedad.
Un accidente el 20 de noviembre de 1971, la planta de Fundidora de Monterrey, fue testigo de uno de los accidentes más trágicos de la ciudad. A las 6:50 de la mañana, mientras los trabajadores transportaban una olla de acero fundido, esta chocó contra una plataforma, ocasionando que unas 25 toneladas de hierro fundido a una temperatura cercana a los 1600 grados centígrados se derramaran y alcanzaran a 17 trabajadores.
El accidente tuvo lugar en el Horno No.4 y provocó la muerte instantánea de 15 trabajadores, quienes prácticamente quedaron desintegrados por la masa ardiente. Un empleado falleció al día siguiente y un ingeniero murió nueve días después.
¿Por qué cerró la Fundidora?Si bien el accidente fue un duro golpe para la comunidad de trabajadores de la Fundidora, no fue este el motivo que derivó en el cierra de la emblemática empresa. Una combinación de factores, tales como la devaluación, problemas sindicales y deuda financiera, terminaron por ser los detonantes para que se llevara a cabo el cierre definitivo de la Fundidora.
Ahora los terrenos en donde se encontraba la empresa, han perdurado como un parque público, en donde aún se preservan testigos mudos de la historia de lo que alguna vez fue un gigante de hierro ardiente.