Para evitar que la combinación del alcohol con el volante cobre vidas durante esta temporada decembrina; Municipios metropolitanos arrancaron la implementación de Operativos Antialcohol, mejor conocidos como "antialcohólicas".
Con la llegada de las posadas y demás festejos navideños y de fin de año, los regios "beben, beben y vuelven a beber", y con ello aumentan también los accidentes protagonizados por conductores en estado de ebriedad.
Ante ello, y para prevenir pérdidas humanas, los elementos de Vialidad y Tránsito pusieron manos a la obra.
Las principales arterias del área metropolitana y puntos de alta afluencia se encuentran blindados por este tipo de filtros itinerantes.
Aunque para algunos la instalación de las antialcohólicas es solamente una medida recaudatoria y un nido de corrupción; para las autoridades y otra parte de la población la implementación de este tipo de operativos es de suma importancia como medida de prevención.
Con base al reglamento de Tránsito, no está permitido conducir con aliento alcohólico superior a los 0.79 gramos de alcohol por litro de sangre.
De superarlo, el vehículo será remitido al corralón y se suspenderá la licencia de conducir; mientras que el automovilista deberá pagar una multa que puede ir desde los 20 mil hasta los 60 mil pesos en caso de reincidencia, adicional a arrestos de 8 a 36 horas.
La ebriedad incompleta se presenta cuando una persona tiene entre 0.80 y menos de 1.5 gramos de alcohol por litro de sangre, y la ebriedad completa de 1.5 o más gramos de alcohol por litro de sangre.
Dependiendo del caso, también podrían ser condenados a prisión con la responsabilidad de indemnizar a las víctimas del accidente.
El llamado es a no manejar alcoholizado y evitar difundir las ubicaciones donde se instalan los retenes.
Es de destacar que aunque el parque vehicular y los accidentes viales en general se han disparado en Nuevo León, los percances ligados al consumo del alcohol han caído en 20 años.
En el caso del Municipio de Monterrey, las antialcohólicas operan de jueves a domingo, y de ser necesario se extenderán toda la semana.
Señalaron que lo permitido por el reglamento es conducir con aliento alcohólico hasta 0.79 grados, pero por las festividades habrá tolerancia respecto a las detenciones.
Si la persona está entre los 0.80 y 100 grados, y se encuentra en sus cinco sentidos, se le permitirá que un familiar pase por ella.
No obstante, el vehículo va a ser remitido y la multa será aplicada.
De ser la primera infracción, se le suspenderá la licencia por seis meses y aplicarán una multa de 21 mil 714 pesos; en la segunda, las multas ascenderán a 49 mil pesos y la suspensión de la licencia se extenderá a un año.
Aquellos que reincidan por tercera vez, deberán pagar más de 66 mil pesos, y su licencia quedará suspendida de por vida.
Por otro lado, en el municipio de San Nicolás existe una cero tolerancia.
Aquí las multas van desde los 6 mil hasta los 60 mil pesos, dependiendo de la cantidad de alcohol en la sangre.
Al año, aseguró el Alcalde Daniel Carrillo, se registraban hasta 3 mil conductores que manejan bajo el influjo del alcohol.
Con la implementación de estos operativos, las cifras han bajado hasta un 50 por ciento.
Las sanciones económicas en San Pedro y Santa Catarina también alcanzan los 60 mil pesos.
Municipios como Guadalupe y Apodaca aplican multas de 7 mil a los 20 mil pesos, y Escobedo y Juárez de 2 mil hasta los 18 mil pesos.
Las autoridades advirtieron que sobre aviso no hay engaño, y si van a ingerir bebidas embriagantes durante los festejos, elijan un conductor designado, o bien utilicen el sistema del transporte público o algún taxi de aplicación para no combinar el alcohol con el volante.
Bajar la incidencia, insistieron, es un esfuerzo que se debe de hacer en conjunto, entre la población y las autoridades, debido a que las personas que beben y manejan no tienen conciencia de lo que hacen.
Por su parte, colectivos en pro de la instalación de las antialcohólicas, calificaron de necesarias dichas medidas, argumentando que muchos no ven la utilidad de las antialcohólicas, hasta que por desgracia son alcanzados por las estadísticas de un accidente a causa del consumo de alcohol.
"Son muchos los afectados, los que mueren y bueno, hemos insistido mucho en que por un lado las autoridades están haciendo un gran esfuerzo, todos los municipios", mencionó.
"Pero, por otro lado, nosotros los conductores que a veces consumimos y conducimos en estado de ebriedad no tenemos conciencia del daño que podemos hacer, entonces es un esfuerzo de todos, los ciudadanos y las autoridades y todos estamos trabajando", concluyeron.