El déficit de más de 5 mil policías estatales y municipales en el área metropolitana dificulta el cumplimiento de medidas de protección derivadas de órdenes de restricción, admitió ayer Gerardo Palacios Pámanes, Secretario de Seguridad Pública en el Estado.
A su salida de la Mesa de Construcción de la Paz, en Palacio de Gobierno; el funcionario estatal indicó que corresponde a la policía municipal proteger a quien presenta una denuncia por violencia para que su agresor no se le acerque, pero tienen poca capacidad de fuerza.
En los últimos días, al menos dos mujeres, una de ellas elemento de Fuerza Civil, murieron a manos de sus parejas pese a contar con una orden de restricción.
"Las órdenes de protección a las mujeres que presenten una denuncia como restringir al hombre que fue denunciado, son tareas que le corresponden a las policías municipales y estas tiene un estado de fuerza muy baja", refirió.
"A como veo las cosas como exsecretario de Seguridad Pública municipal, tiene que ver con el enorme déficit policial que padece Nuevo León, tenemos muy pocos policías, ya sea municipales o estatales".
"El déficit en mi opinión personal y a reserva de mayor reflexión al respecto o de actualización al estudio que nosotros tenemos, es de 5 mil policías en el área metropolitana, hablando de estatales y municipales, no se diga de zonas rurales donde en algunos municipios no hay policías", explicó.
Señaló que aún y cuando se cuenta con buenos sueldos, el incorporar nuevos policías resulta casi un milagro.
Lo anterior debido a que son pocos los interesados, y de ellos no todos pasan los filtros de confianza.
"La Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, es una ley que aplica en todo el país, establece tantos requisitos que prácticamente es un milagro poder graduar gente de la academia, nos dificulta poder incrementar la cantidad de policías históricamente", manifestó.
En contraste, externó, en otros países incluso se tienen corporaciones especializadas para estas medidas de protección, pero aquí los policías deben atender la llamada de auxilio en tiempos menores a los 7 u 8 minutos, lo que es poco posible.(CLG)