Los cuatro integrantes de la familia que sufrieron lesiones durante la explosión de una casa en la Colonia San Marcos, en Escobedo, continúan muy graves en varios hospitales de Monterrey.
Mientras que el cuerpo del pequeño Fernando Caleb, que murió el pasado sábado, será sepultado sin servicios funerarios debido al estado en que terminó su cuerpecito.
La familia de la víctima hizo un llamado a la comunidad y autoridades para poder solventar los gastos de la hospitalización que se incrementa cada minuto.
El resto de los lesionados son, el papá del menor de nombre Diego Armando Chávez, de 23 años de edad.
Este permanece en el Hospital Universitario, debido a que por la clase de lesiones que presenta no pudo ser llevado a un hospital del IMSS.
Otra de las lesionadas que es reportada como grave, es la madre de Caleb, identificada como Ana Karen Acosta, de 21 años de edad.
Mientras que la abuela del menor de nombre Rosario Ambris, de 47 años, ambas internadas en la Clínica 21 del IMSS.
La señora Mireya Acosta Martínez, tía del padre de familia, dijo que están pasando por una situación muy crítica y no cuentan con recursos para mantener a las víctimas en el hospital.
El trágico accidente se reportó la madrugada del pasado sábado, cuando un cilindro de gas explotó por acumulación de gas.
El siniestro fue en una vivienda ubicada en la Colonia San Marcos, en el municipio de Escobedo, y dejó un saldo de diez personas lesionadas y 34 casas con daños severos.
El siniestro se reportó al filo de la media noche, por lo que la mayoría de las víctimas fueron sorprendidos ya en sus camas descansando.
Las autoridades reportaron que los tres integrantes de la familia que radica en la casa donde se originó el siniestro, son reportados como graves, entre ellos un bebito que desafortunadamente falleció.
La Fiscalía General de Justicia del Estado, mantiene acordonada la casa ubicada en la Calle Mario Valle número 138, de la Colonia San Marcos, Sector Pioneros, mientras que se realizan las investigaciones del caso.