Un año antes de graduarse de preparatoria, Imelda Martínez decidió que estudiaría comunicación en el Tec de Monterrey y comenzó a trabajar para ganarse una beca. Hoy, se le otorga el Premio al Mérito EXATEC en el campus San Luis Potosí.
Este premio reconoce a egresados que de forma sostenida han destacado de manera extraordinaria, fortaleciendo positivamente la reputación y prestigio del Tec en su comunidad, con alto grado de impacto y responsabilidad social, en diversas áreas o disciplinas.
Entre algunos de los requisitos que existen para ganar este premio se encuentra el ser un líder en su campo con evidencias comprobables y ser un agente de cambio.
A través de una trayectoria construida con esfuerzo, perseverancia y disciplina, Imelda se conseguido lo que ella considera el éxito mientras se ha vuelto acreedora al reconocimiento que hoy se le hace.
Labor con impacto social
Al graduarse de la carrera de Comunicación en 1990, Imelda comenzó a incursionar en la comunicación corporativa, para luego hacer un diplomado en relaciones públicas en Saint Louis University en Misuri, Estados Unidos.
Una vez terminado, regresó a San Luis Potosí, donde comenzó a trabajar en la empresa de su familia, Tunna Industrial S.A. En paralelo, laboró en Canel's en un modelo de trabajo enfocado en la imagen de la marca al exterior, patrocinios y donativos en los que se involucraban socialmente.
Gracias a ese trabajo fue que Imelda conoció la Asociación Educadores Integrales, que estaba instalada en la Ciudad de México atendiendo comunidades de alta marginación con un proyecto de formación de líderes.
"Hablé con mi papá, director de la empresa familiar en ese momento, y con mis jefes en Canel's y me fui a México a trabajar en este proyecto maravilloso", cuenta la EXATEC.
"Me encantó este proyecto porque me hizo muy sensible a las necesidades comunitarias".
En la asociación atendió la comunicación y relaciones públicas, apoyando a los distintos centros a nivel nacional relacionados con las comunidades y la formación de líderes. Debía identificar a los líderes y becarlos para que estos se pudieran dedicar de lleno al programa.
Para lograr esto, a Imelda le tocaba atender a los donantes, sensibilizarlos de la necesidad y hacerles ver lo que podían cambiar con su donativo.
Durante su gestión la institución llegó a 3,488 comunidades de todo el país; alcanzando a más de 966,000 personas directamente, quienes, a su vez, llegaron a más de 1,100,000 hogares.
"Me encantó este proyecto porque me hizo muy sensible a las necesidades comunitarias", explica.
Trayectoria profesional
Luego de estudiar una maestría en Comunicación Corporativa, Imelda regresó a San Luis Potosí donde se reincorporó al negocio familiar.
Tunna Industrial S.A. se desarrolla en la industria petroquímica y en los sectores médico y automotriz. Comenzó cuando hace 43 años su padre detectó la necesidad de aire presente en múltiples procesos en distintas industrias y creó esta empresa pionera en lo que realiza.
Imelda ha trabajado por muchos años en esta empresa y se ha dedicado a llevar esta iniciativa más lejos. "Pero nunca he perdido de vista que cualquier entorno en el que nos desarrollemos es un entorno que nos permite impulsar al ser humano", relata Imelda.
Para la EXATEC, el sentido de la formación humana, el impulso y del desarrollo del ser humano tiene que ser una constante en todos los que han recibido la posibilidad de formarse y educarse.
"...cualquier entorno en el que nos desarrollemos es un entorno que nos permite impulsar al ser humano".
Cuenta que de alguna manera su camino de vida siempre ha sido buscar siempre de qué manera desarrollar equipos humanos, competitivos, pero sobre todo felices.
Cree que la felicidad se alcanza cuando las personas encuentran en su entorno los medios para ser lo que puedes llegar a ser. Explica que por esto el liderazgo está estrechamente relacionado, pues este no trata de cuantas personas te siguen, sino de cuántas personas impactas.
"Las impactas mediante encontrar en ellos su gran potencial, ayudarlos y apoyarlos en su descubrimiento para que ellos lo desarrollen al máximo"
Su fórmula de éxito en 4 factores
Primero, el autoconocimiento. Explica que es importante conocerte y saber entender el balance en tu persona entre los aspectos que se pueden potenciar y los dones con los que naciste, creciste y desarrollaste. El saber quién eres, dónde estás parado y qué es lo que te gusta.
En segundo lugar, es importante saber elegir tus batallas. La comunicóloga sostiene que siempre va a haber disyuntivas, pero que hay que prepararse para ser capaces de elegir el camino que queramos seguir.
En tercer lugar, la disciplina, sin la cual ella cree que es muy difícil lograr tus objetivos y serle útil a la sociedad. Por último, Imelda cree que lo más importante después de trabajar en ti es olvidarte de ti para enfocar tus capacidades en las necesidades del otro.
"Es hermosísimo cuando tú alcanzas una profunda satisfacción en tu desarrollo profesional impulsando el desarrollo de alguien más", concluye.
"El hecho de haber tenido esa posibilidad (de estudiar en el Tec), nos compromete a buscar la forma de que muchos más tengan acceso a una educación como la que el Tec nos puede proponer".
Que le depara el futuro
El Tec de Monterrey es el alma mater de Imelda, además de ser una institución que admira debido a su poder de influencia y las personas que forman parte de ella, por lo que expresa ser un honor para ella el ser premiada.
Para Imelda Martínez, el Premio Mérito EXATEC es también un compromiso. "El hecho de haber tenido esa posibilidad (de estudiar en el Tec), nos compromete a buscar la forma de que muchos más tengan acceso a una educación como la que el Tec nos puede proponer".
Considera que debe continuar aprendiendo y trabajando de manera permanente en función de lograr una mejor sociedad, que la educación pueda llegar a todos los rincones de México.