Con una innovadora propuesta en escena, el Teatro Espacio "Rogelio Villarreal Elizondo", ubicado en la Facultad de Artes Escénicas de la UANL, fue sede de la obra "Ñaque o de piojos y actores".
Aunque presenta una escenografía sencilla, son sus dos protagonistas, Solano y Ríos, los que llenan el espacio con un guión en el que rompen la cuarta pared con la audiencia en todo momento.
La representación utiliza un formato original y dinámico en el que la audiencia se siente parte de la historia de ambos personajes a través de una comedia que explora lo absurdo y lo camp.
Los actores le hacen saber al espectador que están conscientes de que están actuando y que saben que hay un público frente a ellos.
Reflexiones sobre la profesión actoral
La trama consiste en situar a los dos protagonistas, que pertenecen a la antigua compañía de cómicos del Siglo de Oro Español, en 2024, en que los avances tecnológicos y sociales de la era contemporánea los hacen reflexionar por una hora sobre el papel de la profesión actoral en la sociedad.
A través de añoranzas, Solano y Ríos plantean anécdotas en lugares de España como Valencia, Sevilla y Toledo que van gestando una especie de crítica al trabajo escénico y las condiciones precarias de la industria de la actuación.
Aunque es mordaz y plantea bromas de humor negro, el guión de José Sanchis Sinisterra llega a ser existencialista pues pone a la audiencia a pensar en temas como la mortalidad y el legado que dejamos en nuestras propias vidas para de esa manera inmortalizarnos en el mundo terrenal.
La obra dirigida por Victor Martínez provoca a través de su envoltura bizarra un cuestionamiento interno sobre lo que hacemos y no hacemos en vida y cómo esto da un sentido de pertenecencia a este mundo.