Innovaciones para atender problemas de agua, usar energías limpias, romper barreras para personas con discapacidad o alimentar mascotas son las que hicieron realidad estudiantes de Ingeniería Mecatrónica en el Tec de Monterrey campus Laguna.
En su quinto semestre, en el bloque Diseño Mecatrónico, las y los jóvenes enfrentaron el reto de desarrollar prototipos vinculados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Organización de las Naciones Unidas.
Estos ODS buscan, entre otras tareas, proteger al planeta y mejorar la vida. Por ello, los alumnos crearon: jardines inteligentes, un seguidor solar, un elevador y un dispensador de alimentos para mascotas.
"Al desarrollar el prototipo aprendí cómo se utilizan y funcionan distintos componentes para el producto y diferentes metodologías que nos ayudaron a nosotros poder crear el prototipo", expresó la estudiante Ana Cristina de la Rosa.
"Con el desarrollo del prototipo aprendí cómo se utilizan y funcionan distintos componentes, así como metodologías".
El reto: hacer un prototipo con ingeniería
Los alumnos de mecatrónica elaboraron los prototipos desde cero.
El reto consistió en definir un objetivo para posteriormente completar las diferentes fases del proyecto: la primera etapa fue diseñar el concepto seleccionado, la segunda implementarlo y la tercera hacer pruebas.
Para ello, partieron de las metodologías generales del diseño que les permitieran detectar fallas en procesos o productos.
Con base en ello, pasaron a plantear conceptos o soluciones tomando en cuenta especificaciones técnicas y después seleccionaron las opciones más viables y realizaron los prototipos.
Así, trabajaron en un diseño a nivel de sistema y otro a nivel de detalles, investigando cuáles son los elementos que llevaría su proceso de manufactura y qué tipo de maquinaria requeriría.
Y es que los prototipos mecatrónicos pueden utilizar diversos materiales, desde madera, papel, cartón, cartulina y hasta impresoras 3D.
Por ello, durante este proceso se puso en práctica la diseño para fabricación y conjunto (DFMA), con la cual los alumnos evaluaron la efectividad de su diseño respecto a todos los componentes y su tiempo de vida útil.
Ana Cristina, quien participó en la elaboración del seguidor solar, comentó que durante estas 5 semanas se encontraron con distintos desafíos, como acoplarse al voltaje de la ciudad y a los lineamientos sobre cómo debe de ser el alumbrado público.
"Tuvimos que eso escalarlo para que nosotros pudiéramos comprobar que fuera algo que sí fuera a ayudar y que realmente tuviera la eficiencia que nosotros buscamos, entre un 80 y 90 % de eficiencia", señaló.
Así, los estudiantes de quinto semestre de Ingeniería Mecatrónica en el Tec de Monterrey campus Laguna innovaron con prototipos capaces de solucionar o atender problemáticas a escala.