Valdivia, 17 Feb (Notimex).- Un mosaico del sitio de memoria de Valdivia “Memorial Estancilla”, que recuerda a víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet, fue completamente destruido la noche de ayer en un nuevo ataque contra el espacio conmemorativo, lamentó el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) de Chile.
La sede regional del INDH en Los Ríos denunció que el sitio ha sido atacado varias veces durante las últimas semanas, en el marco del estallido social que vive Chile desde octubre de 2019, a lo que se suma la agresión de este domingo 16 de febrero.
“El INDH condena la destrucción de este espacio que representa una medida de reparación y nunca más para las víctimas de la dictadura”, sostuvo Sebastián Smart, jefe regional del INDH en Los Ríos.
“Ubicado sobre el puente Estancilla, en la ruta de Valdivia con la localidad costera de Niebla, el memorial fue levantado en 1984 como una forma de recordar a Rogelio Tapia de la Puente, Raúl Barrientos Matamala y Juan Boncompte Andreu, ejecutados en 1984 por agentes de la dictadura en el contexto de la llamada Operación Alfa Carbón, que cobró la vida de otras cuatro personas en ciudades del sur de Chile”, detalló el instituto.
Además de la destrucción del mosaico, la agresión de este domingo incluyó el borrado de una placa con los nombres de las víctimas y el rayado de las aletas laterales del memorial con la palabra “justicia”.
“Para el INDH es un imperativo ético reprochar este tipo de acciones y propiciar la protección de estos espacios”, indicó el INDH, y recordó que en 2018 recomendó al poder legislativo introducir un proyecto de reforma a la ley 17.2888, de monumentos nacionales, para incorporar la figura del sitio de memoria.
“(Y así) optimizar los procesos tendentes a garantizar la preservación de estos lugares como espacios de educación en derechos humanos y garantía de no repetición”, explicó el organismo.
La agresión de Valdivia se suma al ataque del 18 de enero contra la tumba del cantautor Víctor Jara, asesinado en los primeros días del golpe de Estado de 1973, y la vandalización del memorial de la comunista Gladys Marín, registrada el 8 de febrero.