La vacuna de AstraZeneca contra el Covid-19 se encuentra en el ojo del huracán luego de las revelaciones sobre el riego latente de desarrollar trombosis en casos poco comunes, según documentos judiciales.
Este hallazgo, aunque preocupante, no es exclusivo de esta vacuna, ya que otras como la de Johnson & Johnson también han sido vinculadas a riesgos similares.
Desde 2022, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) en Estados Unidos emitieron advertencias sobre el uso de la vacuna de Johnson & Johnson, especialmente en grupos de alto riesgo, debido a la posibilidad de desarrollar síndrome de trombosis con trombocitopenia (TTS). Aunque estos eventos son poco frecuentes, se ha reconocido una conexión entre la vacuna J&J/Janssen y el TTS.
Expertos instan a considerar el equilibrio entre beneficios y riesgos
El Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización instó a la población a recurrir a las vacunas de ARNm como la de Pfizer sobre la de Johnson & Johnson, que fue retirada del mercado estadounidense en 2023.
Expertos como Alejandro Macías recomendaron que la asociación entre la vacuna de AstraZeneca/Universidad de Oxford y la trombosis no es nueva y que los beneficios de la vacunación superan los riesgos, según investigaciones previas.
Otros riesgos asociados a las vacunas contra el Covid-19
Además de la trombosis, otras enfermedades fueron relacionadas con las vacunas contra el Covid-19. Por ejemplo, la vacuna de Johnson & Johnson se relacionó con casos del síndrome de Guillain-Barré (SGB), un trastorno poco común del sistema nervioso. Asimismo, se reportaron casos de miocarditis y pericarditis asociadas con las vacunas de ARN-m, aunque la mayoría de los pacientes han respondido bien al tratamiento.
La evaluación cuidadosa de los beneficios y riesgos de las vacunas contra el Covid-19 sigue siendo crucial para informar las decisiones de salud pública y garantizar la seguridad de la población.