IUDAD DE MÉXICO/EL UNIVERSAL.- La policía tomó una "decisión errónea" al no entrar antes en las aulas de una escuela en Uvalde donde el martes un joven armado mató a 19 niños y dos maestras antes de refugiarse en un salón, dijo este viernes en conferencia de prensa el director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Steven McCraw. Diecinueve agentes esperaron en el corredor de la escuela a que una unidad táctica ingresara a las aulas casi una hora después de que el pistolero, Salvador Ramos, de 18 años, entrara en el edificio el martes. Los agentes de la Patrulla Fronteriza que mataron al pistolero se frustraron y actuaron por iniciativa propia después de que la policía local les dijo que esperaran, reportó NBC News. El jefe de Policía del Distrito Escolar de Uvalde es Pedro Pete Arredondo, reportó CNN. El gobernador Greg Abbott se negó a decir si el jefe de policía del distrito escolar de Uvalde debería mantener su trabajo. La policía recibió numerosas llamadas de varias personas en las dos aulas afectadas, incluida una de una estudiante a las 12:16 horas locales, 34 minutos antes de que la policía respondiera a las 12:50, en la que informaba que "entre ocho y nueve estudiantes estaban vivos", dijo McCraw. El gobernador Abbott dijo que fue "engañado" sobre cierta información que recibió de los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley que lideraban la pesquisa.
TRUMP INSTA A ARMAR A CIUDADANO
El expresidente de Estados Unidos Donald Trump (2017-2021) acusó este viernes a los demócratas de "politizar" el tiroteo en el colegio de Uvalde (Texas), que mató a 19 niños y dos profesoras, arremetió contra sus "grotescos esfuerzos" para controlar la venta de armas e instó a armar a los ciudadanos para combatir el "mal", reportaron agencias internacionales.
PIDE PERDÓN PAPÁ DEL TIRADOR DE UVALDE: "DEBIÓ MATARME A MÍ"
El padre del joven de 18 años que el martes pasado asesinó a 21 personas, incluyendo 19 niños, en una escuela primaria en Uvalde, Texas, pidió perdón por lo que hizo su hijo. "Debió matarme a mí", afirmó. En entrevista con The Daily Beast, Salvador Ramos dijo que "quiero que la gente sepa que lo siento. Siento lo que hizo mi hijo. Nunca esperé que hiciera algo así". De 42 años, Salvador Ramos admitió que no había pasado mucho tiempo con su hijo, llamado también Salvador, debido a que no trabaja en Uvalde y a la pandemia de coronavirus. La madre de Salvador (padre) padecía cáncer y él no podía arriesgarse a contraer Covid-19 por ella. Pero para Salvador hijo, las precauciones que tomaba su padre con la pandemia eran motivo de frustración y que desde hace aproximadamente un mes se negó a hablar con él.
GREG ABBOTT CANCELA APARICIÓN EN LA CONVENCIÓN DEL RIFLE
El gobernador de Texas, Greg Abbott, canceló este jueves su aparición en la convención de la Asociación Nacional del Rifle (ANR), programada para este viernes en Houston, luego del tiroteo en una primaria en Uvalde que dejó 21 muertos, además del agresor. La asistencia de Abbott a este evento que tendrá lugar entre el 27 y el 29 de mayo desató una oleada de críticas, luego de la masacre ocasionada por un joven de 18 años que para su cumpleaños compró dos rifles, uno de los cuales utilizó para matar a 19 niños y dos maestras. Estaba programado que Abbott hablara junto con el expresidente Donald Trump y el senador estadounidense Ted Cruz, pero ahora hará "comentarios en video pregrabados", según dijo el portavoz de Abbott, Mark Miner, citado por el diario Houston Chronicle. En vez de trasladarse a Houston para la convención, Abbott viajará a Uvalde, donde dará otra conferencia de prensa para hablar de los recursos que el estado destinará a los afectados por el tiroteo en la Escuela Primaria Robb. El evento tendrá lugar a las 15:30 horas, poco después de la hora en la que estaba previsto que el gobernador se dirigiera a los asistentes de la NRA. Pese al tiroteo, Abbott ha rechazado cualquier intento de restringir el acceso a las armas; en vez de ello, ha pedido enfocar más recursos en la salud mental de los estadounidenses que viven en las zonas rurales. Texas es uno de los estados de Estados Unidos donde resulta más fácil adquirir un arma, incluyendo rifles AR-15 como los que suelen ocuparse en masacres.